El Frente Nacional de Productores y Consumidores de Leche denunció que la política de importar el lácteo en polvo condena a los bajos precios que se paga a los productores y a la virtual desaparición de este sector conformado por más de 200 mil familias.

En un comunicado expuso que se han fomentado las importaciones de sólidos lácteos, que en su mayoría son utilizados para adulterar los productos genuinos que elabora en México la industria honesta, lo que significa un fraude para los consumidores con quesos que no son quesos y otros productos, que únicamente son fórmulas.

Álvaro González Muñoz detalló que las compras externas de leche en polvo ascienden a 523 mil toneladas en los tres años recientes (en 2007 fueron 149 mil; en 2008 más de 176 mil, y en 2009 casi 200 mil) y al inicio del segundo tramo de la administración se rompen las esperanzas de recuperación para el sector ganadero al fijarse cupos para comprar al extranjero de casi 200 mil toneladas.

Con esta política los productores de leche del país son discriminados, debido a que las importaciones van a rebasar las 700 mil toneladas de leche en polvo, mientras que la producción nacional se tiene que tirar por la falta de mercado, destacó.

El dirigente llamó a las autoridades a imponer regulaciones en este sector productivo con el fin de garantizar la sana alimentación de la población, pues hasta el momento no se ha ordenado el mercado y no se cumple con las normas sanitarias.

Explicó que la política aplicada por la Secretaría de Economía en el sector lechero sólo ha beneficiado a los grandes industriales del ramo, a quienes les fueron condonados más de 4 mil millones de dólares, vía cupos de importación, en el lapso de desregulación fijado por el Tratado de Libre Comercio de América del Norte.