La Habana, 13 de febrero. El intercambio cultural entre Estados Unidos y Cuba repuntó con la llegada de Barack Obama al gobierno, aunque por debajo de las expectativas que creó, opinaron intelectuales de ambos países, quienes instaron en La Habana a impulsarlo con, independencia de la voluntad oficial.

Algo ha cambiado, pero queda mucho por cambiar todavía, sostuvo el meteorólogo José Rubiera, quien informó que en su especialidad se registró un entendimiento natural, debido a los riegos compartidos ante huracanes y desastres naturales.

El panel Relaciones culturales Cuba-Estados Unidos: presente y futuro, se realizó el viernes en la Feria del Libro de La Habana, con especialistas de ambos países.

Coincidieron en señalar que esos intercambios históricos por vecindad tocaron fondo entre 2003 y 2004, por restricciones del gobierno de George W. Bush, pero aun así quedaron brechas, que ahora experimentan cierto auge con Obama, señalaron.

Es un flujo que no está protagonizado necesariamente por los dos gobiernos, pero sí por actores de la cultura que se han ido acercando, dijo el politólogo Rafael Hernández, quien citó viajes de músicos, religiosos, pintores y de funcionarios de gobiernos locales.

En los meses recientes, la banda Kool and the Gang actuó en La Habana, mientras dos cubanos, Omara Portuondo y Chucho Valdés acudieron a la entrega de los Grammy. Orquestas como Van Van y Charanga Habanera, actuaron en Estados Unidos.

Obama levantó las restricciones a los viajes y al envío de remesas de los cubano-estadunidenses a la isla impuestas por Bush. De ellos, 296 mil visitaron Cuba en 2009. Pero aún hay muchas trabas legales del embargo impuesto en 1962, que impiden un flujo de intercambio cultural mayor, indicaron.

La poeta Nancy Morejón señaló que en el centro de las dificultades está el embargo.

Para el cubano-estadunidense Jorge Domínguez, profesor de la Universidad de Harvard, en ambos países hay gran interés por la cultura de su vecino y un potencial extraordinario que hay que explotar.

Señaló que su universidad ha mantenido constante intercambio académico con Cuba, pues más de 60 investigadores cubanos la han visitado en los pasados 15 años y han colaborado con el Instituto de Medicina Tropical de La Habana en temas como el sida.

Milagros Martínez, de la Universidad de La Habana, presentó a varios de los 56 universitarios estadunidenses que realizan un semestre de estudios en ese centro; opinó que Obama no cumplió las expectativas que levantó, pero admitió una leve y lenta mejoría.

Sheryl Lutjens, directora de la sección Cuba, de la Asociación de Estudios Latinoamericanos opinó que para los académicos persisten problemas de acceso a la información del otro país y dificultades migratorias.

Con Obama tenemos una incógnita, pues todavía no está claro si va a apoyar el intercambio y aún su administración niega permisos para visitar Cuba.

Según el académico Carlos Alzugaray, estamos en un momento importante de oportunidades, donde las expectativas son grandes, pero las dificultades también.

Los intelectuales llamaron a eliminar la barrera de desconfianza que existe en todos los ámbitos, oficial y personal, para eliminar la resistencia a un mayor intercambio.