Domingo 7 de febrero de 2010, p. a19
Londres, 6 de febrero. Un Manchester United imparable humilló sin piedad (5-0) al maltrecho Portsmouth –que metió tres autogoles y se mantiene como el rival más débil de la Liga Premier–, con lo cual arrebató temporalmente al Chelsea el liderato del torneo en una jornada muy alentadora para el Liverpool, que logró meterse en la zona de Champions tras vencer al Everton.
El aplastante marcador lo firmaron el inglés Wayne Rooney y el búlgaro Dimitar Berbatov; contribuyeron en propio marco Anthony Vanden, Richard Hughes y Marc Wilson.
Así, tras 25 jornadas, el Manchester se ubicó temporalmente en la primera posición, con 56 unidades, un punto por encima del Chelsea de Carlo Ancelotti, que mañana protagonizará el otro gran derbi de la jornada ante el Arsenal.
En tanto, el Everton buscaba su primera victoria en el campo del Liverpool desde 1999, pero un gol anotado por el holandés Dirk Kuyt en el minuto 54 arruinó el objetivo del técnico David Moyes.
El Liverpool gozó de más ocasiones, pero a la media hora el griego Sotiros Kyrgiakos fue expulsado. Sin embargo, lejos de remontar, el Everton perdió en los últimos minutos a un jugador, al sudafricano Steven Pienaar, por doble amarilla.
El Tottenham empató a cero con el Aston Villa y perdió, así, la ocasión de recuperar el cuarto puesto general, que previamente le arrebató el Liverpool.
El Burnley superó 2-1 su choque en casa con el West Ham United, que le permitió abandonar la zona de descenso, mientras el Hull City sorprendió 2-1 al Manchester City.