Tijuana, BC, 5 de febrero. La Asociación Contra la Impunidad denunció la desaparición forzada de ocho edecanes, de entre 20 y 23 años de edad, contratadas el 24 de julio de 2007 por una supuesta empresa de promociones sociales.

Podría tratarse de una red de trata de blancas, advirtió el padre de una de las jóvenes, quien ante la inacción judicial realizó pesquisas privadas y en 2009 localizó al enganchador, lo denunció y fue detenido, pero luego quedó en libertad por que la Procuraduría General de Justicia del estado argumentó que la víctima era mayor de edad y no había manera de presumir algún ilícito.

Raymundo Palma, padre de María del Carmen Palma, dijo que su hija fue convocada a un establecimiento en la delegación Cerro Colorado de Tijuana por un hombre que la contrató como edecán para un acto.

Melinda como le llama de cariño, tenía 20 años de edad entonces. Ese día la clasificaron para ir al acto y la subieron a una panel blanca.

Posteriormente le informaron que la mantenían cautiva en un rancho de Tecate, pero fue hasta seis meses después que se hizo un operativo militar en el sitio, el que ya había sido abandonado.

Por su cuenta, Palma y su esposa descubrieron el nombre de la persona que las contrató, su domicilio en el fraccionamiento El Rubí, al oriente de Tijuana, y obtuvieron fotografías y documentos acusatorios que mostraron ante las autoridades.

Poco después el Grupo de Inteligencia de la Secretaría de Seguridad Publica de Tijuana les informó que habían detenido al presunto secuestrador, pero lo dejaron libre porque la joven era mayor de edad al momento de ser enganchada para el trabajo de edecán.

Palma comentó que hace un año recibió una llamada anónima en la que le sugirieron que buscara a su hija en la zona norte, el área de tolerancia pegada a la línea internacional, porque era víctima de dos proxenetas. No tuvo éxito.

Yo le pido a diosito que me devuelvan a mi hija, no haré nada contra ellos (los secuestradores) y entiendo que las autoridades tienen muchos casos que resolver, no les echo la culpa, pero quiero que me la regresen, expresó.