A bordo de un Mercedes y a sus 41 años, el germano doblará la edad de algunos pilotos
Mi meta será estar en el escalón superior del podio al final de la temporada
, adelantó el heptacampeón
Dirigentes de la escudería Ferrari y aficionados italianos mostraron su decepción
Jueves 24 de diciembre de 2009, p. a13
Hamburgo, 23 de diciembre. Tras meses de dudas y rumores, el alemán Michael Schumacher confirmó lo que era un secreto a voces: 2010 lo verá a bordo de un Mercedes luchando por su octavo título mundial en la Fórmila Uno.
Mi meta, naturalmente, será estar en el escalón superior del podio al final de la temporada
, adelantó el siete veces campeón del orbe, quien será compañero de su compatriota Nico Rosberg.
Planeamos tres años
, informó Schumi, próximo a cumplir 41 años (el 3 de enero), y aseguró que su retiro le proporcionó toda la energía que ya no tenía cuando abandonó la F-1, en octubre de 2006: Me siento como un niño de 12 años que anda dando saltos por ahí
.
La vuelta con Mercedes implicará para el conductor germano tener un coche potencialmente ganador y su rencuentro con el británico Ross Brawn, técnico que conoció desde que corría en Benetton, quien lo guió a todos sus títulos y ahora es director de su nuevo equipo.
El piloto se mostró entusiasmado por la combinación perfecta
que integran Brawn y Mercedes, que recién compró al equipo campeón de constructores 2009, Brawn GP.
Fue la escudería germana para la que Schumacher corrió el Mundial de Prototipos antes de llegar a la Fórmula Uno, la que prácticamente le abrió las puertas del máximo circuito hace 20 años.
Schumacher había preparado su regreso con Ferrari a principios de este año, en sustitución del lesionado Felipe Massa, pero tuvo que renunciar a esa idea por una lesión en el cuello que le ocasionó un accidente de motocicleta previo.
Durante su retiro, el alemán ha trabajado como asesor de Ferrari, y aunque el equipo aclaró que el alemán no tiene un acuerdo formal con la escudería, los dirigentes de ésta se mostraron decepcionados por su partida, al igual que los aficionados italianos.
Mercedes y Ferrari serán los únicos equipos propiedad de un fabricante, ya que BMW, Honda y Toyota abandonaron la categoría entre el año pasado y éste, en tanto Renault tiene previsto vender una parte significativa de sus operaciones en Gran Bretaña.
Schumacher espera poder emular al austriaco Niki Lauda y al francés Alain Prost, campeones que volvieron a competir y ganaron títulos tras un tiempo fuera de la F-1.
Con su regreso, se producirá además una batalla de generaciones, pues se medirá ante al menos un piloto al que le dobla la edad.
El campeón más longevo de la F-1 sigue siendo el argentino Juan Manuel Fangio, quien conquistó su quinto título mundial a los 46 años. El de mayor edad en ganar un gran premio es el italiano Luis Fagioli, quien lo hizo en 1951, a los 53 años.