El capitán del Cruz Azul, Gerardo Torrado, rechazó tajante la etiqueta de ya merito o subcampeonísimo para su escuadra, e indicó que “muchos equipos quisieran haber llegado a las finales que La Máquina disputó –aunque sin fortuna– en años recientes”.

Pese a sus camionetas y coches de lujo, la cita de ayer en La Noria resultó algo parecido a una marcha fúnebre, silenciosa y escurridiza. La mayoría de los jugadores se presentaron para recoger algunas pertenencias, darse el abrazo navideño y de Año Nuevo, y fueron citados de vuelta para el 2 de enero. A la salida, el grueso del plantel optó por pisar el acelerador y alejarse a la brevedad.

Es un gran mérito estar en las finales, defendió Torrado desde la ventanilla abierta de su auto, aunque desgraciadamente no se ha podido ganar, pero el equipo es un líder, sostuvo. Comentó que el balance y el análisis corresponde hacerlo a la directiva y cuerpo técnico; a uno sólo le resta descansar, yo quiero pasarla bien con mi familia y regresar con las pilas recargadas.

Aunque abundaron las fallas en el plantel cementero, justo en los partidos decisivos, Torrado acotó: aquí ganamos y perdemos todos, el equipo estuvo siempre comprometido para lograr el objetivo, hay gran unión e insistiremos en el próximo torneo.

Fausto Pinto mostró una sonrisa resignada: “es muy duro quedarte a un pasito, es complicado... Está faltando lo último, creo que tenemos un buen equipo, se hicieron los méritos suficientes para estar en la final, pero no se consiguió porque hay cosas por mejorar. Antes del juego nos sentíamos bien, creíamos que podíamos hacerlo, que se podía revertir y dar el campeonato a nuestra gente.

“El futbol siempre da revanchas y la oportunidad de seguir jugando, no podemos quedarnos en lo que pasó: debemos pensar en lo que viene. No creo que haga falta una limpia porque hay un buen plantel; quizá se requieran retoques, pero aquí hay triunfadores que siempre quieren ganar.

Me resta evaluar lo que sucedió... Hoy ya se habló poco del juego, vamos a tratar de aprovechar las vacaciones y distraernos, para después regresar y hacer mejor las cosas, anotó el ex tuzo.

Mario Ortiz manifestó: nos faltó un poco más de suerte y concentración. Hubo lapsos muy buenos que no supimos aprovechar y la derrota cala mucho, fue mi primera final y resultó dolorosa. Queríamos regalarnos un campeonato y no se pudo; hay que levantar la cabeza y seguir trabajando, quizá si mejoramos y hacemos más largos esos periodos de buen futbol se logre algo más, indicó el delantero.

Héctor Gutiérrez, con la tristeza a cuestas, consideró que fue una final complicada y, aunque deben reconocer los errores, también es justo decir que Monterrey hizo lo suyo. Total, hayamos jugado bien o mal, perdimos, y duele igual. En el grupo sabemos lo que hemos sufrido, luchado y soñado... por algo no se dio, pero se dará en el futuro con el trabajo de todos, expuso.

Otro que se presentó a ponerse a las órdenes del club fue Israel López, quien concluyó su contrato, y aunque estuvo a préstamo con Toluca, dijo que desea renovar con La Máquina.