La liberación de 26 sujetos acusados de tener vínculos con el narcotráfico por un comando en el municipio de Escobedo, Nuevo León, fue consecuencia del enfrentamiento en que elementos de fuerzas especiales de la Armada de México ultimaron a 10 sicarios de Los Zetas, entre ellos, a Ricardo Almanza Morales, El Gori 1, el viernes pasado.

Fuentes navales confirmaron lo anterior y agregaron que la determinación de los sicarios de asaltar la casa de arraigo número dos que tiene la Procuraduría General de la República (PGR) en el municipio neoleonés de Escobedo, fue porque pensaban que en el enfrentamiento habían sido detenidos algunos de sus compañeros y decidieron recobrarlos.

De acuerdo con los informantes, el personal de infantería de marina tenía la encomienda de capturar a Almanza Morales, presunto responsable del asesinato del general retirado Juan Arturo Esparza García –ocurrido el 4 de noviembre pasado–, quien tenía unos días de haber asumido el cargo de director de Seguridad Pública y Vialidad del municipio de García, Nuevo León.

Para evitar filtraciones, el personal de Marina actuó solo, sin el apoyo de ninguna dependencia federal.

Cuando el contingente arribó a la finca campestre de la colonia Bosques de la Silla, municipio de Benito Juárez, fueron recibidos a balazos y se inició el tiroteo.

Una parte de los delincuentes logró huir con rumbo a Reynosa, Tamaulipas, pero en el entronque de la carretera que va a la localidad de Apodaca, se encontraron con un grupo de soldados.

Trascendió que el enfrentamiento con los soldados fue fortuito y que era falsa la versión de que los militares acudieron en apoyo de los marinos.

Cuando el grupo delictivo que encabezaba El Gori 1 se dio cuenta del enfrentamiento y de la posible captura de su líder, fue que decidieron tomar por asalto la casa de arraigo, pensando que los detenidos habían sido llevados a ese lugar, agregaron los informantes.

Inicialmente se pensó que eran 26 ex policías los que habían sido liberados por los sicarios, sin embargo, las autoridades precisaron posteriormente que 15 eran integrantes de Los Zetas, entre éstos, Juan Carlos Martínez Hernández, El Camaleón, segundo al mando de la organización delictiva que opera el cártel del Golfo en el municipio de Guadalupe.

De acuerdo con las fuentes consultadas, la participación de los infantes de marina en acciones contra el narcotráfico se intensificará en diversos puntos del país.