A pesar de que en México 800 mil personas tienen alguna discapacidad motriz, según cifras oficiales, el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) dotó solamente con un vehículo especial de transporte a cada estado del país.

Al repartir las 32 camionetas que disponen de rampas para sillas de ruedas y cuyo costo en total fue 30 millones de pesos, el presidente Felipe Calderón reconoció que es muchísima la necesidad de transporte especial en el país y se debe continuar con el esfuerzo.

En tanto, el secretario de Educación Pública, Alonso Lujambio, aceptó que es insuficiente el hecho para garantizar la inclusión de personas con discapacidad en el sistema educativo nacional, pues actualmente sólo se atiende a 196 mil alumnos en formación básica, además de quienes cursan el bachillerato y la licenciatura.

En una ceremonia realizada en el Campo Marte, Calderón llamó a derribar las barreras que enfrenta esta población y consideró que la más grave es la inconsciencia de mucha gente que no percibe la dimensión del problema.

En su silla de ruedas, Alberta Sánchez Galicia, alumna de tercero de secundaria en la escuela del Centro de Rehabilitación Gaby Brimmer del DIF, relató que tiene una discapacidad neuromotora y padece dificultades para trasladarse a su escuela y a otros lugares.

En los vehículos comunes requerimos que una persona nos cargue y nos ayude a subir o bajar; y los cinturones de seguridad no se adaptan a nuestras necesidades. Esta es una dificultad que diariamente enfrentamos, contó la adolescente de 17 años.

Esto, pese a que la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad establece que esta población tiene derecho a vivir en forma independiente y participar en todos los aspectos de la vida diaria en igualdad de condiciones con las demás personas, comentó.

La joven se mostró satisfecha porque subió a este vehículo en su silla de ruedas sin que nadie la cargara y estaba protegida por un cinturón de seguridad.

Sin embargo, estos vehículos, que puede transportar a ocho personas, resultan insuficiente para atender a los discapacitados que requieren de este servicio.

Calderón reconoció que es importante que existan más vehículos para que Alberta y otras personas puedan ir a la escuela, a una terapia o al cine.

También se comprometió a luchar por la plena inclusión de personas con discapacidad no como una dádiva, un favor, una concesión o una caridad, sino como un reconocimiento elemental de sus derechos.

Por otra parte, en la ceremonia de entrega de reconocimiento a las mejores prácticas de inclusión educativa, con la que se conmemoró el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, Lujambio afirmó que los maestros serán pieza clave para garantizar un sistema más incluyente, aunque enfatizó que aún estamos en un proceso de aprendizaje para garantizar que todos, sin ninguna diferencia, acudan a la escuela.

Margarita Zavala, presidenta del DIF, indicó que el artículo tercero constitucional establece con claridad que todo individuo tiene derecho a recibir educación sin distinción ni discriminación en absoluta inclusión.