Diputados locales y dirigentes del PRD, así como funcionarios del GDF y de órganos autónomos, reaccionaron en contra de los montos que asignó la Cámara de Diputados a la ciudad en el presupuesto federal para 2010, limitando metas de programas y obras prioritarias en salud, desarrollo metropolitano y seguridad pública, entre otros.

El presidente de la Comisión de Desarrollo Metropolitano de la ALDF, Carlos Augusto Morales, lamentó que por cuestiones políticas se redujo el monto del Fondo Metropolitano, que comparte con los estados de México e Hidalgo, beneficiando a otras zonas conurbadas del país que inclusive presentan subejercicios.

De los 6 mil 500 millones de pesos para financiar obras en las tres entidades, se autorizaron 3 mil 100 millones, menos incluso de los 3 mil 300 asignados este año.

El diputado Leonel Luna cuestionó la falta de sensibilidad de los diputados federales al no destinar un solo peso al Fondo de Protección Civil.

El dirigente del PRD capitalino, Manuel Oropeza, indicó que se confirma la alianza PRI-PAN para golpear al GDF, pero a quien realmente vapulean es al ciudadano al afectar programas y obras prioritarias para la ciudad, además de forzar a la administración local a echar mano de su techo de endeudamiento para continuar obras estratégicas, como la línea 12 del Metro.

El secretario de Seguridad Pública, Manuel Mondragón, dijo que los proyectos para 2010 se quedarán cortos al no disponer de los recursos solicitados para el programa de videocámaras.

Tendrá una partida similar a la de este año: 13 mil millones de pesos, que sólo servirá para salarios de los policías, combustible y mantenimiento de las unidades, impidiendo la apertura de nuevas plazas y la adquisición de patrullas y chalecos.

Armando Ahued, titular de la Secretaría de Salud, dijo que los 75 millones de pesos asignados al sector son insuficientes para concluir obras como el hospital de Iztapalapa, la nueva clínica de VIH/sida y el nosocomio en Tepepan para la población de reclusorios.

Advirtió que a consecuencia de la crisis económica la demanda de atención está creciendo porque la gente que perdió su empleo y se atendía en el IMSS acude a nuestras unidades, casi 350 mil personas más de las que ya atendíamos.