Por el reporte de más de 30 mil casos de dengue en México al mes de octubre, 26 por ciento más que en 2008, la Secretaría de Salud (Ssa) expresó su preocupación y puso en marcha acciones de fumigación en las zonas de alto riesgo, sobre todo en Veracruz y Tabasco, estados que desde hace semanas enfrentan inundaciones y fuertes lluvias.

El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud de la dependencia, Mauricio Hernández Ávila, manifestó que por el momento, pese a la difícil situación, no hay brotes epidémicos en esas entidades. El saldo es blanco, pero las medidas sanitarias de los gobiernos federal y estatales serán reforzadas.

Según datos del Sistema Único de Información para la Vigilancia Epidemiológica (Sinave), a octubre el número de casos ascendía a 30 mil, 26 por ciento más que los 22 mil 470 reportados en 2008.

Sin embargo, se estima que en noviembre el número se ha elevado en 3 mil, pues Nayarit, Guerrero, Michoacán, Jalisco y Colima también han registrado incrementos importantes.

La cifra de dengue hemorrágico también creció, al pasar de 5 mil 887 casos el año pasado a 6 mil 962 al 31 de octubre pasado, es decir, un aumento de casi 16 por ciento, número que se elevará al cierre de 2009, según datos del más reciente boletín epidemiológico del Sinave.

Hace días la Ssa admitió el riesgo de epidemias en Tabasco y Veracruz, por la concentración de agua, animales muertos y la proliferación del mosco transmisor de la enfermedad en las zonas inundadas.

En las áreas donde el agua ha empezado a descender se aplica cal, debido a que cuando hay inundaciones y, sobre todo, muerte de animales los residuos pueden causar infecciones.

La dependencia informó que en la zona operan médicos y brigadistas que atienden a las personas con problemas de salud. Al menos 5 mil enfermos en Tabasco y Veracruz han recibido consultas, la mayoría por infecciones en las vías respiratorias.

La Ssa destacó que la campaña contra el dengue se ha fortalecido en meses recientes y que a raíz de las inundaciones sólo a Tabasco el gobierno federal ha destinado 16 millones de pesos para combatir el mosco.

En entrevista radiofónica, Hernández Ávila expresó que la dependencia está tomando todas las medidas para evitar la propagación del dengue. El saldo es blanco, estamos iniciando fumigaciones aéreas para controlar la utilidad de vectores y hacer la sanitización que corresponde. El dengue es lo que más nos preocupa, ya lo habíamos controlado bien en Coatzacoalcos y Minatitlán, y tenemos más de 90 personas trabajando en el control de vectores en ese lado de Veracruz y un mismo número en Tabasco, destacó.

Ante la situación de emergencia que viven muchas zonas de esos dos estados, el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) anunció que continúa acopiando víveres para apoyar a los damnificados de Tabasco y Veracruz. La ayuda puede ser llevada a Prolongación Xochicalco esquina Repúblicas, en la colonia Santa Cruz Atoyac, en horario de 9 a 18 horas.

Los productos que se necesitan son: agua embotellada, atún, sardinas, sal, leche enlatada o para bebé, galletas, pañales, toallas sanitarias, linternas, frijoles, cereal, colchonetas, cobertores o cobijas, abrelatas, jabón, papel higiénico, detergente en polvo y líquido, cloro, pasta dental, gel desinfectante, platos, vasos, cucharas desechables, servilletas y sandalias de plástico sin usar.