El dirigente del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), Martín Esparza, entregó ayer en el Senado los convenios que, afirmó, prueban que ese organismo estuvo preocupado siempre por mejorar la productividad y modernizar Luz y Fuerza del Centro (LFC).

Los documentos serán analizados por la Junta de Coordinación Política (JCP), la cual buscará el reinicio del diálogo entre la dirigencia de los electricistas y el gobierno federal.

Queremos ir a una mesa de negociación, pero con respeto al sindicato, a nuestro contrato colectivo y bajo la premisa de regresar a laborar, porque nuestra materia de trabajo existe. No van a quitar las plantas de generación ni las líneas o las subestaciones eléctricas que nosotros hemos construido en los últimos 100 años, recalcó Esparza.

Los convenios de productividad de LFC, entre ellos uno que elaboró el Instituto Politécnico Nacional (IPN) para el SME, fueron recibidos por el secretario técnico de la mesa directiva del Senado, Horacio Duarte Olivares, quien señaló que por indicaciones del presidente de esa instancia, Carlos Navarrete, hará llegar copias a todos los grupos legislativos.

La intención es que la próxima semana el tema se lleve a la JCP para que en ese órgano de gobierno se decida la forma en que el Senado intervendrá para acercar a las partes en conflicto al diálogo, comentó en entrevista aparte el senador Graco Ramírez, del PRD.

Esparza advirtió que aunque se haya liquidado a LFC, otra empresa pública tendrá que dar el servicio. Que nos digan si será la Comisión Federal de Electricidad (CFE) para poder negociar con ellos, porque tenemos claro que la titularidad del contrato colectivo es del sindicato y la materia de trabajo también, resaltó.

Acompañado por integrantes del comité central, explicó que el documento entregado al Senado recopila información sobre todos los convenios que el SME firmó con dependencias del gobierno federal, entre ellas las secretarías de Energía, del Trabajo y de Hacienda, con la finalidad de resolver los problemas técnicos, administrativos y financieros de Luz y Fuerza.

Mencionó que en el convenio con el IPN, signado en 2006 y ampliado en 2008 para realizar un diagnóstico sobre la situación de la empresa y las alternativas de solución, se incluyó el desarrollo tecnológico del área de comercialización, que ya no se pudo echar a andar por el sabadazo contra el SME.

Insistió en que se quiere acabar con el sindicato por intereses de empresarios y políticos de convertir en negocio el servicio eléctrico y la red de fibra óptica de LFC.

Con la red de distribución que tenemos, que es la más grande del país, con tecnología que desarrollaron nuestros técnicos, podemos dar servicios de Internet, transmisión de voz e imagen. La infraestructura ya está y representa más dinero que el propio suministro de electricidad.