Jueves 22 de octubre de 2009, p. 29
Acapulco, Gro., 21 de octubre. Las aguas residuales que generan medio millón de acapulqueños que habitan en las inmediaciones de la bahía de Santa Lucía se vierten al mar sin procesar desde hace años en el punto conocido como Playa Olvidada, al norte de la ciudad, entre La Quebrada y Pie de la Cuesta, admitió el director de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado del Municipio de Acapulco (CAPAMA), Rigoberto Félix Díaz.
En un recorrido por la nueva planta tratadora Aguas Blancas, ubicada donde se encontraban las viejas instalaciones que saneaban las aguas negras generadas por los vecinos del vaso de la bahía, Félix Díaz reconoció que el problema de las aguas negras persistirá hasta que esté listo el nuevo complejo, que tiene un avance de 73 por ciento. No hay otra opción
, dijo.
El director de la CAPAMA también admitió que no existen mecanismos para medir los niveles de contaminación de la bahía; sin embargo, dijo que no es mayor de la que sufríamos antes de iniciar los trabajos de la nueva planta
.
Interrogado sobre los 35 millones de dólares que aportaría el gobierno español para el proyecto –anunciados por la vicepresidenta primera de España, María Teresa Fernández de la Vega en agosto del año pasado–, Rigoberto Félix dijo que con esos fondos se saneará la periferia del municipio. Nos han dicho que los recursos ya están autorizados y que empezarán a entregarse en los próximos meses. Esperamos que en 2010 se aplique
, señaló.
Por su parte, el alcalde Manuel Añorve Baños dio a conocer que en el programa de saneamiento de la bahía se invierten 238 millones de pesos, con apoyo federal.