Marco Antonio Pikolín Palacios, defensa del aún campeón Pumas, reflexionó: A veces uno no sabe manejar el triunfo. Pensamos que haciendo lo mismo que el torneo anterior iba a resultar, pero ya vimos que no. Nos faltó madurez para manejar el éxito del título, y hoy se puede decir que el torneo Apertura 2009 fue un fracaso.

Palacios señaló que a los auriazules nos queda esta experiencia y ahora debemos redoblar esfuerzos con humildad, pues presión siempre hay. La primera exigencia es personal, porque uno se juega el trabajo y un prestigio que cuesta mucho ganar en nuestro futbol como para tirarlo en una temporada, lamentó.

Ayer los auriazules trotaron en el bosque de Tlalpan y, al término del ejercicio, Palacios reconoció que es triste sufrir una temprana eliminación: Duele porque Pumas siempre debe estar en la liguilla, e insistió en que buscarán tener un cierre digno y cada elemento tiene la tarea de hacer un análisis para mejorar.

Negó que la directiva tenga responsabilidad por no haber reforzado al plantel. ¡No, al contrario! Pienso que les quedamos a deber, ellos siempre nos dieron confianza, total apoyo y no hay más que agradecer y tratar de sacarnos la espina para el siguiente torneo, señaló.

Ante la pregunta de si ya hay desgaste en el grupo con el técnico Ricardo Ferretti, tajante respondió: No. Cuando hay un buen entrenador que siempre suma, que está exigiendo y trata de sacar tu mejor juego, hay que seguir, creo que estamos bien con él.

Luego del título, en Pumas nadie se esperaba tener un mal torneo; en imagen de archivo, Dante López lamenta una derrotaFoto Víctor Camacho

–¿Hay compromiso al decir que lucharán por un buen cierre o es sólo un cliché?

–Si perdemos los partidos restantes y empezamos mal el siguiente torneo tendremos problemas. Sería muy triste que después de un título estuviéramos otra vez peleando por no descender.

El Pikolín indicó que ahora tratarán de coronar la campaña en Concachampions; es importante, porque si sales campeón la recompensa es grande. Nos vamos a enfocar en ella, prometió.

A su vez, Israel Castro, aún con la molestia tras la octava derrota, ahora ante San Luis, la cual mató cualquier sueño de pasar a la liguilla, comentó: “No estamos nada contentos, sólo queda seguir trabajando y poner buena cara; estamos en esta situación porque así lo decidimos con nuestras actuaciones y si uno se pone negativo la cosa sale peor.

Somos un equipo, pero cada quien vive una circunstancia diferente; hay que ser equilibrados y prudentes, porque al final esto es lo que nos gusta y a lo que nos dedicamos... Muchas veces uno ni siquiera se puede explicar qué pasa: el equipo al inicio no jugó mal, pero los resultados no se dieron y eso nos mermó, sostuvo.

Castro se disculpó con la afición, mientras Ismael Íñiguez dijo que los invaden sentimientos de pena, enojo, vergüenza... todo se junta. Nadie esperaba que diéramos un torneo así.