En 2010 México se quedará al margen de la reactivación económica mundial, en caso de no lograr establecer una segunda ronda de reformas, particularmente fiscal, que le permitan ampliar su base de contribuyentes, elevar los ingresos públicos no petroleros para el financiamiento de infraestructura y fortalecer el mercado interno, advirtieron analistas financieros tanto del país como del extranjero.

El director para América Latina de Moody’s Economy.com, Alfredo Coutiño, consideró que de no concretarse las reformas fiscal, energética y laboral, México incluso perderá ante Brasil el liderazgo económico en América Latina y se rezagará en un previsible nuevo ciclo de expansión, debido a su mayor sincronización con la economía de Estados Unidos.

Mientras tanto, especialistas del grupo financiero Invex puntualizaron que la recuperación es un escenario que puede desaparecer hacia el primer semestre de 2010. De acuerdo con el director de análisis del grupo financiero, Rodolfo Campuzano Meza, nuestra hipótesis es que hacia el segundo trimestre del próximo año se manifestará con más fuerza la falta de tracción en el consumo y por ende en el PIB.

Apuntó que no obstante la información favorable sobre el desempeño de la economía nacional, tanto en Estados Unidos como en México persiste la impresión de que este escenario puede desaparecer hacia el primer semestre del 2010.

Insistió en que Invex está dudosa de que la recuperación pueda sostenerse hacia 2010 a un ritmo fuerte, toda vez que se sustenta en programas de apoyo fiscal específicos y de corta vida, y porque persisten un elevado desempleo y una difícil situación en el mercado de crédito.

En tanto, el grupo financiero Santander hizo referencia a la amenaza de las calificadoras internacionales de reducir sus perspectivas del país si no se resuelven este año los factores que limitan su margen de maniobra fiscal.

Encrucijada del desarrollo

Para el especialista de Moody’s Economy.com –subsidiaria de Moody’s Corporation, una de las tres más influyentes calificadoras de deuda a escala mundial–, a partir del año entrante la región latinoamericana alcanzará un crecimiento de 4 por ciento, indicador que crecerá a 5 por ciento a mediano plazo, de acuerdo con su potencial. Sin embargo, México, junto a los países centroamericanos, se mantendrá rezagado de esa reactivación económica por el alto grado de vinculación de su economía con la de Estados Unidos.

El reforzamiento de las cuentas fiscales, en combinación con la disciplina gubernamental, son necesarios para dar un mayor poder contracíclico a la política fiscal. El sector energético ha llevado a cabo algunas pequeñas reformas, pero son necesarios cambios más profundos en países donde se requiere que la participación de la inversión privada sea un complemento más importante para desarrollar y aumentar la capacidad de producción. En el sector financiero se permitirá más competencia a fin de abaratar la prestación de servicios y lograr que más personas accedan a ellos. Por su parte, en el mercado laboral se logrará tener más flexibilidad al cambiar las leyes para permitir mayor movilidad del factor trabajo. La reforma del Estado fortalecerá a las instituciones políticas y la transparencia, a la vez que protegerá mejor los derechos individuales, puntualizó Alfredo Coutiño.