Cubanos residentes en Miami, unos partidarios del concierto encabezado este domingo por el cantante colombiano Juanes en la Plaza de la Revolución de La Habana, y otros que en repudio, destruyeron discos del músico en la concurrida Calle Ocho, tuvieron enfrentamientos y obligaron a la intervención de la policía.

La organización anticastrista Vigilia Mambisa reunió decenas de personas ante el tradicional café Versailles, en el barrio de La Pequeña Habana de Miami, en una protesta contra el polémico concierto Paz sin fronteras. Juanes traidor, amigo de Fidel Castro, decía una de las pancartas.

Vigilia Mambisa llevó a la conocida Calle Ocho una máquina aplanadora de construcción para destruir discos y fotos de Juanes; al mismo tiempo, otros que pasaban por el lugar en sus vehículos, así como decenas de personas con banderas cubanas, mostraron su apoyo a la iniciativa de Juanes y pidieron a los manifestantes que se fueran.

Esta gente es extremista. En Miami los que están contra el concierto son muy pocos, dijo Camilo Hernández, joven cubano residente en La Pequeña Habana.

La diferencias entre unos y otros generaron un breve enfrentamiento con empujones e intercambio de insultos que exigió la intervención de policías.

Semanas de intenso debate en el exilio cubano precedieron el histórico concierto. Carlos Saladrigas, director del Cuba Study Group, dijo que con el concierto el exilio cubano de Miami ha tenido la enorme oportunidad de volver a recordar al mundo todo lo que ocurre en Cuba, los problemas de los cubanos y la situación de los presos políticos.

El diario El Nuevo Herald, que se edita en Miami, aseguró el sábado que el gobierno cubano denegó el visado de entrada a varios artistas cubanos asentados en Florida, como Willy Chirino y Gloria Estefan, que pretendían participar en el concierto, si bien luego la ex integrante de Miami Sound Machine dijo que no tocaría en las actuales condiciones políticas de la isla.