Cuernavaca, Mor., 5 de septiembre. A 100 años de distancia de la Revolución Mexicana aún hay grandes carencias, aunque más profundas, debido a la sobrepoblación, a la falta de higiene y a la poca educación. Hay un caldo de cultivo para manifestaciones sociales: ahí están los estados hirviendo. Sin embargo hay fuerzas del poder que siempre han tratado de callar al pueblo por medio de la violencia y hoy día a la inconformidad se le confunde con la delincuencia, afirmó el fotógrafo, productor y director de fotografía de cine documental Manuel Peñafiel, durante la inauguración de su exposición fotográfica Pancho Villa, aquellos que lo conocieron.

Asimismo, Peñafiel lamentó que el actual gobierno deje llegar las cosas tan lejos para que el ciudadano salga con enojo a las calles a exigir a lo que tienen derecho.

Con esta exposición fotográfica, Manuel Peñafiel pretende dar a conocer las penurias que sufrieron aquellas personas que se levantaron en armas en la Revolución Mexicana en 1910, al no tener otra opción para que se respetaran sus derechos.

Con esta muestra quiero también patentizar que México aún sigue con grandes carencias sociales; lo que busco es que la gente no dé la espalda al verdadero México, que no se deje manipular por algunos medios informativos que hacen pensar que todo está bien y que los problemas se están resolviendo, agregó.

Las armas como último recurso

Insistió en que Pancho Villa, aquellos que lo conocieron, representa a los mexicanos que tomaron las armas, no por delincuentes, sino porque fue el último recurso para exigir sus derechos legítimos.

Aseguró que los relatos que ha recopilado de la gente que conoció a Pancho Villa narran que fue un hombre desinteresado, que no buscaba el poder personal. Pero que fue asesinado (ya retirado) por el gobierno, por temor a que se volviera a levantar. Mi afán como fotógrafo es decir al ciudadano que el arte está abierto; no hay mejor medio que el fotográfico: es una página arrebatada al tiempo y obsequiada a la historia, expresó.

La muestra fotográfica permanecerá en el Jardín Borda de esta capital hasta el 17 de octubre. Entre los personajes que se encuentran en las imágenes sobresalen los hijos, hermanos y el chofer de Doroteo Arango.