San Francisco, 27 de agosto. Una mujer que fue secuestrada cuando tenía 11 años frente a su casa en California fue encontrada después de vivir 18 años en un patio escondido y aislada por su captor, con quien concibió dos hijas, informó hoy la policía.

Jaycee Lee Dugard, de 29 años, era una pequeña rubia de ojos azules cuando fue secuestrada frente a su casa en South Lake Tahoe (noreste de California) en 1991, en presencia del esposo de su madre, Carl Probyn.

Ella goza de buen estado de salud, pero vivir en la parte de atrás de una casa por 18 años tiene un precio, dijo el oficial Fred Kollar, de la comisaría del condado de El Dorado, al este de San Francisco.

Dugard estuvo en cautiverio en un patio escondido en la parte trasera de la casa del sospechoso Phillip Garrido, un hombre con un historial de abusos sexuales, quien estando en libertad condicional levantó sospechas al ser divisado con dos menores y una mujer, su esposa Nancy.

Cuando fue interrogado por los oficiales esta semana, el hombre confesó que era el captor de la niña desde hace 18 años. La policía manifestó que faltan detalles que se conocerán en los próximos días.

Se señaló que la propia Jaycee Lee Dugard caminó hasta una comisaría de este suburbio de la gran área de la bahía, aledaño a San Francisco, y dio su identidad para empezar a develar el infierno que vivió desde que tenía 11 años.

Según el diario Sacramento Bee, Dugard tuvo su primera hija a los 14 años y otra cuatro años después. La mayor tiene hoy 15 y la menor 11.

Niñas que nunca fueron ni a la escuela ni al médico, apuntó el oficial Kollar.

Las tres jóvenes fueron mantenidas la mayor parte de sus vidas en unas estructuras pequeñas, encondidas detrás de muros y árboles, agregó Kollar.

La policía describió el lugar de cautiverio como un sitio salvaje detrás de una vivienda suburbana, con algunas cobijas y dos carpas pequeñas esparcidas por el suelo en un espacio reducido.

Phillip Garrido, de 58 años, quien ya había cumplido condena por violación, y su esposa Nancy Garrido, ambos residentes en la casa del secuestro, son los dos detenidos por este caso, el cual pasó a manos de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés), confirmó un portavoz de la comisaría de Contra Costra, donde está el departamento de policía de Concord, al que acudió Dugard el miércoles.

Los Garrido fueron detenidos el miércoles. Se les fijó una fianza de un millón de dólares, precisó el oficial.

Las autoridades confirmaron que Jaycee se reunió el jueves con su madre, Terry Probyn, y su media hermana, una chica de 19 años.

Carl Probyn, padrastro de Jaycee, sobre quien pesaron las peores sospechas por este caso, que le valió la ruptura de su matrimonio con Terry, dijo a la televisión que esto era como sacarse la lotería.

Estoy simplemente agradecido de que esté viva y bien, dijo conmovido Probyn, un hombre de 60 años, quien siguió la conferencia de prensa de la policía.

Cuántas vidas interrumpidas, atinó a decir Probyn en su casa del condado de Orange, al sureste de Los Ángeles, y a unos 650 kilómetros de donde apareció el jueves su hijastra.

Todo lo que dije era verdad, agregó el hombre de origen canadiense, veterano de la guerrra de Vietnam, quien el día del plagio vio a Jaycee bajar de su autobús escolar y de pronto la escuchó gritar cuando dos personas la subían a un auto.