Sanaa, 23 de agosto. Al menos 100 chiítas de un grupo rebelde y dos de sus comandantes murieron en una operación realizada por el ejército de Yemen para recapturar un pueblo en el norte montañoso del país, mientras organizaciones humanitarias estimaron que 100 mil personas huyeron de sus hogares desde que se inició el conflicto, hace dos semanas.

Los cadáveres de más de 100 rebeldes fueron descubiertos en carreteras de las afueras de la ciudad de Hafr Sufyan. Parece que los cuerpos pertenecen a rebeldes que intentaban huir durante la operación de los últimos dos días, informó el gobierno en un comunicado divulgado en esta capital.

Aseguró que entre los muertos están Mohsen Saleh Hadi Gaud y Salah Jorman, dos jefes de la guerrilla que busca reinstaurar una forma de gobierno clerical que regía en Yemen hasta el golpe de Estado de 1962, que proclamó la república.

No hubo confirmación independiente sobre el balance de víctimas.

Las tropas gubernamentales comenzaron el pasado 11 de agosto una nueva ofensiva contra los rebeldes, que controlan parte de la provincia de Saada y algunos territorios de la provincia de Amran.

El viernes, el gobierno del presidente Alí Abdullah Saleh reiteró las condiciones para un cese el fuego con los insurgentes, quienes rechazaron la propuesta.

Yemen, empobrecido país de unos 23 millones de habitantes en la punta de la península arábiga, lucha contra militantes de Al Qaeda y separatistas en el sur. Además afronta una rebelión en el norte montañoso que limita con Arabia Saudita.

Organizaciones humanitarias alertaron que a raíz del conflicto en Haff Sufyan cerca de 100 mil personas abandonaron sus hogares.

El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia declaró que hace todo lo que puede para llegar a los niños y mujeres más vulnerables que dejaron sus hogares presas del pánico.