Pese a la caída de ingresos se abrieron dos programas más de apoyo a la gente, señala
Propone universalizar
el plan de mejoramiento barrial, el cual arrancó en 2007
Domingo 19 de julio de 2009, p. 29
El incremento de la población en condiciones de alta y muy alta marginación durante los primeros dos años de gobierno de Felipe Calderón, según datos del Inegi, reafirma la política social del Gobierno del Distrito Federal, que a pesar de la caída en sus ingresos a consecuencia de la crisis económica, no sólo mantiene las metas en todos sus programas, sino que echó a andar dos más: comedores comunitarios y medicamentos gratuitos a domicilio.
Al señalar lo anterior, el secretario de Desarrollo Social del gobierno local, Martí Batres Guadarrama, dijo que se hará un esfuerzo aún mayor para cumplir con la reforma de la Asamblea Legislativa que reduce, a partir de septiembre la edad para tener derecho a la pensión alimentaria a personas adultas mayores, de 70 a 68 años, aunque podría aplicarse de manera gradual, según la disponibilidad de los recursos para de mantener el equilibrio de las finanzas públicas.
En su mensaje al instalar el segundo encuentro de evaluación del Programa de Mejoramiento Barrial de la dependencia, Batres dijo ante beneficiarios: nos dice el Inegi que la gente más pobre empobreció 8 por ciento más de 2006 a 2008, los dos primeros años de Calderón. Cuando vemos eso, nosotros decimos que tenemos razón, que vamos por el camino correcto y que lo mejor que tiene el GDF es su política social
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Muestra de ello, agregó, es que en ninguna otra ciudad del país hay programas como el de mejoramiento barrial, o el de becas a estudiantes de bachillerato, ni un presupuesto para desarrollo social como el del Distrito Federal, de más de 37 mil millones de pesos.
Planteó la posibilidad de universalizar
el programa de mejoramiento barrial que ha tenido un desarrollo positivo: arrancó en 2007 con 80 millones de pesos con los que se financiaron 49 proyectos y este año aumentó a 200 millones para 190 proyectos.
Es una meta difícil ante la actual situación económica, admitió, pero no imposible
y explicó que se tendrían que destinar al programa mil 300 millones de pesos, de los poco más de 100 mil millones del presupuesto anual de la ciudad, pero cada año, en cada colonia, barrio y pueblo, habría una obra de mejoramiento
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