Los temores sobre el impacto que podrían haber tenido violencia y crimen organizado en los comicios quedaron disipados el domingo pasado. Sin embargo, los niveles de abstencionismo en ciudades y regiones con fuerte presencia del narcotráfico fueron los más altos del país.

Ciudad Juárez, Chihuahua, donde ha ocurido el mayor número de asesinatos, alcanzó un porcentaje superior a 73 puntos de abstención en los cuatro distritos electorales de esa localidad.

De acuerdo con datos del Programa de Resultados Preliminares Electorales (PREP), el distrito con más abstencionismo en el país fue el número 1, con cabecera en Ciudad Juárez, con 74.1 por ciento, seguido por los otros tres de esa urbe fronteriza: en el 2 la abstención fue de 73.83 por ciento; en el 3, de 73.31, donde además se contabilizó 12 por ciento de votos nulos, y en el 4, de 73.15 por ciento.

Otra ciudad donde se han presentado la violencia y las ejecuciones del narcotráfico, Tijuana, tuvo comportamiento electoral similar en los cuatro distritos federales en que se divide. En el 8 de Baja California el abstencionismo rondó las proporciones de Ciudad Juárez, con 73.13 por ciento; en el 7 fue de 72.92 y en el 5 llegó a 70.81 por ciento, todos con cabecera en Tijuana.

En ambas ciudades las elecciones no despertaron interés y sólo uno de cada cuatro ciudadanos acudió a votar, en contraste con el promedio nacional, que fue de casi uno por dos.

En Michoacán, otra entidad que ha resentido la violencia del crimen organizado, los resultados reflejaron distanciamiento de los ciudadanos respecto del proceso electoral. En el distrito 12 de esta entidad, con cabecera en Aptazingán, el abstencionismo fue de casi 70 por ciento, similar al de los distritos 1, en Lázaro Cárdenas, con 69.14, y 5, en Zamora, con 69.86 por ciento.

En términos generales, la participación electoral en Michoacán –estado que vivió intensa polémica por los operativos que realizó la administración federal para detener a funcionarios del gobierno estatal perredista– fue de 33.18 por ciento, una de las más bajas del país, sólo detrás de Baja California.

En Guerrero, donde también se reportan niveles de violencia importantes, se observó más abstencionismo en dos distritos: el 7, con cabecera en Chilpancingo, con 72.05 por ciento, y el 9, de Acapulco, con 71.1 por ciento.

En contraste, los niveles más elevados de participación se registraron en el distrito 1 de Campeche, con cabecera en la capital del estado, con 68.18 por ciento, más de 23 puntos arriba de la media nacional.

Una porcentaje similar de participación se observó en el distrito 1 del estado de México, con cabecera en Jilotepec, con 68.04 puntos.

De acuerdo con los datos del PREP, el nivel de participación en 12 distritos electorales fue superior a 60 por ciento.

Además de los antes mencionados, destacan el distrito 7 de San Luis Potosí, con cabecera en Tamazuchale, con 66.13 por ciento de asistencia a las urnas, y 23 y 36 del estado de México, con cabecera en Valle de Bravo, con 65.23 y 65.52 por ciento, respectivamente.

A escala estatal destacan tres estados por el porcentaje de electores que acudieron a votar: Campeche, con 62.54 por ciento; Colima, con 59.93, y Querétaro, con 58.79 por ciento. En los tres casos hubo elecciones concurrentes para gobernador.