Existen sólo 28 inspectores para verificar 330 mil empresas: Mirón
Miércoles 24 de junio de 2009, p. 42
En la ciudad de México, 156 personas diariamente sufren un accidente en sus centros laborales, mientras cada cinco días se produce la muerte de algún trabajador, debido a la falta de cumplimiento de los patrones, así como a la escasa o nula inspección para hacer que se cumplan las normas de seguridad e higiene en las más de 330 mil unidades productivas, informó el secretario del Trabajo y Fomento al Empleo (STFE), Benito Mirón Lince.
En la celebración del Día Internacional de la Seguridad y la Salud en el Trabajo, explicó que la exposición de los trabajadores a agentes químicos, físicos, biológicos, ergonómicos y sicosociales presentes en el ambiente laboral les puede ocasionar cáncer por trabajar o estar cerca de estas u otras sustancias; hipoacusia, por el ruido; e hipertensión, diabetes e infarto al miocardio por estrés, entre las enfermedades más frecuentes.
Las ocho actividades económicas con mayor siniestralidad son la industria de la construcción, los supermercados y tiendas de autoservicio, la fabricación de productos de plástico, la industria metalmecánica, la fabricación de azúcar y destilación de alcohol etílico, la industria textil, fabricación de muebles, y elaboración y envase de refrescos, aguas gaseosas y purificadas, de acuerdo con información del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), indicó.
La existencia de una plantilla de 28 inspectores, sin embargo, impide que se verifiquen las condiciones en que operan las empresas, pues ello les significaría a cada uno revisar 10 mil 714 en promedio, lo cual es imposible, reconoció, y señaló que en 90 por ciento de los casos los trabajadores y/o sus familias son las que deben afrontar los costos de estos accidentes.
Ello, debido a que en la capital sólo un millón 910 mil 813 trabajadores cuentan con seguro de riesgo de trabajo, y se destinan pocos recursos a esta área, y menos a la de inspección, al considerar que no son un tema prioritario, cuando a la salud en el trabajo no tiene precio. Y los accidentes, riesgos y enfermedades de trabajo producen tres veces más muertes que una guerra, pero pasan desapercibidos porque se producen de uno en uno
, argumentó.