La inseguridad en el transporte urbano se ha convertido en un tema prioritario. A escala internacional, los casos de vandalismo, violencia contra usuarios y conductores, así como hechos de terrorismo han provocado que cinco de cada 10 pasajeros sientan temor al abordar un transporte público, lo que ha permitido el surgimiento de una industria valuada en mil 800 millones de euros anuales, informó Philippe Hervi, gerente de productos de seguridad en el transporte y estrategia de la compañía Alstom.

En entrevista, explicó que la necesidad de instalar cámaras de videovigilancia, sistemas internos de información y esquemas de enlace con las diversas corporaciones policiacas para que actúen en casos extremos de violencia, ha hecho que las empresas del ramo inviertan una fuerte cantidad en la identificación de riesgos, a fin de que los usuarios del trasnporte se sientan seguros y con ello lograr desalentar el uso de vehículo particulares.

Mencionó que cada vez hay mayor demanda en materia de seguridad, derivada del crecimiento poblacional, así como de la delincuencia, lo que ha permitido que la industria de medidas de seguridad vaya en ascenso y no se conozca con precision su valor real, porque no todos están dispuestos a dar a conocer el monto de su inversión.

Hasta el momento, Europa se ha convertido en el principal comprador de cámaras de videovigilancia y sistemas de información y control, seguido de Estados Unidos, y en menor medida los países de América Latina, donde destaca la ciudad de México, que en los años recientes ha dado un giro en la materia para evitar que los problemas que ha detectado en algunos de los servicios que presta, tengan un efecto dominó y se desplace de un sistema a otro, y que esto derive en una situación de inseguridad.

Por ello la determinación de sus autoridades “no sólo de impulsar la sustitución de unidades de transporte público, sino de incorporar nuevos sistemas de transportación que permitan a la gente dejar su auto particular y reducir la pérdida de horas en el tráfico de la ciudad, dijo.