Bloemfontein, 19 de junio. Dos dimensiones futbolísticas muy distantes se enfrentarán este sábado en la Copa Confederaciones: España, que busca un nuevo récord, y Sudáfrica, que quiere una razón para que el balompié siga siendo una esperanza y una pasión en el país.

España tiene muy clara su misión: es cierto que un empate le asegura el primer puesto en el grupo A, pero una victoria le daría la marca absoluta de 15 triunfos consecutivos, superando a Brasil, Francia y Australia. Además, igualaría a Brasil con 35 partidos sin perder.

El tema de los récords, admitió hoy el seleccionador del equipo líder de la clasificación de la FIFA, Vicente del Bosque, “es un asunto que subyace a todos.

No lo expresamos ni comentamos, pero todo mundo tiene en su fuero interno la posibilidad de pasar mínimamente a la historia. Muchas cosas en el futbol son opinables, pero esto es incuestionable, destacó.

Sudáfrica no está preocupada por las estadísticas, pero sus sentimientos pasan por un hecho tangible y por otro bastante más etéreo. Lo tangible: un empate les daría a los pupilos de Joel Santana el pase a las semifinales.

Lo etéreo: el éxito serviría además para que el balompié siga creciendo en Sudáfrica, donde se mantiene como un deporte básicamente practicado por la población negra, aunque el asunto esté empezando a cambiar un poco.

“Sé que son los número uno, que el Barcelona ganó la Champions, pero yo tengo un equipo que debe jugar con personalidad. Si lo hace, será un buen partido”, dijo Santana.

Si la Furia Roja vence o empata también igualaría a Brasil con 35 partidos consecutivos sin perder. En la imagen, el técnico Vicente del Bosque se dirige al entrenamiento junto con El Niño Torres (izquierda)Foto Ap

Los sudafricanos mirarán de reojo el partido que a la misma hora Irak y Nueva Zelanda jugarán en Johannesburgo. Los iraquíes son claros favoritos ante los deprimidos neozelandeses. Si el equipo de Bora Milutinovic gana y Sudáfrica pierde ante España, la diferencia de goles empezará a jugar un papel y el anfitrión podría quedar eliminado.

Por ello, Irak confía en el potencial de la Furia Roja para aguar la fiesta a la hinchada local. Además, apostamos por la victoria y queremos marcar muchos goles, afirmó Milutinovic, cuyo contrato concluye al final del torneo.

Archundia pita mañana

Mientras tanto, el árbitro mexicano Armando Archundia será el juez central del domingo en el duelo crucial del sector B entre Brasil e Italia. El silbante estará acompañado en las bandas por su compatriota Marvin Torrentera y el canadiense Héctor Vergara.

Por cierto, el portero titular de Italia, Gianluigi Buffon, advirtió que su equipo no juega futbol champaña y nunca lo hizo, y apuntó que quien desee verlo que vaya a presenciar los partidos de Brasil o del Barcelona.

Nuestras raíces son diferentes. Estamos mucho más cerca de un equipo como el de Alemania que de los países latinos. Alemania no tiene ninguna superestrella desde hace años y sin embargo llega siempre a semifinales de las grandes competiciones, estimó.

Agregó que no considera injustas las críticas después de la derrota ante Egipto. Si hubiéramos ganado 4-1 nadie habría dicho ni palabra. Perdimos y ahora somos golpeados.