Berlín, 17 de junio. Al final, el pasado arrojó su sombra sobre Katharina Wagner. Después de hablar tres cuartos de hora sobre el futuro de los festivales wagnerianos de Bayreuth, que dirige a partir de este año con su hermanastra Eva Wagner-Pasquier, la bisnieta de Richard Wagner no pudo obviar el pasado nazi de su familia.

Katharina Wagner anunció que un instituto independiente se encargará de investigar las relaciones de los Wagner con el nacionalsocialismo y tendrá acceso a documentos que quizás aún no se conocen.

Puedo decirlo en lo que respecta a mí y a mi padre, sostuvo la noche del martes la hija menor de Wolfgang Wagner, quien renunció a la dirección del festival a los 89 años.

La madre de Wolfgang y nuera del compositor, Winifred Wagner, fue una de las primeras y más firmes partidarias del dictador Adolf Hitler y puso a disposición de la propaganda y la ideología nazi la herencia del compositor.

Sólo la retirada de Winifred de la jefatura de la Colina Verde en 1949 allanó el camino para el resurgimiento del encuentro en manos de sus hijos Wieland y Wolfgang.

Según dijo Katharina Wagner ante 600 personas que colmaron la representación del estado de Baviera en Berlín, los resultados de las investigaciones históricas estarán listos antes del bicentenario del nacimiento de Wagner, en 2013.

La codirectora Eva Wagner-Pasquier se excusó de estar presente en Berlín por cuestiones de agenda. Pero se llevaron una decepción los que quisieron intuir un conflicto familiar según la mejor tradición wagneriana. La cooperación entre las hermanastras es armoniosa y de ella surgió una división natural de las ta-reas, aseguró.

Por un público nuevo y más joven

Katharina Wagner, de 31 años, y Eva Wagner-Pasquier, de 64, fueron nombradas sucesoras de su padre en septiembre de 2008. Este año ofrecerán un festival sin estrenos que será inaugurado el 25 de julio con una puesta en escena de Tristán e Isolda.

Los festivales fueron presentados con el lema Futuro Bayreuth.

Katharina habló mucho de la marca Bayreuth, de la identidad corporativa y del objetivo de abrirse a un público nuevo y más joven.

Asimismo anunció un Bayreuth más cercano a los amantes de la música y una presentación actual en Internet. Wagner dijo en este contexto que el podcast del festival en el portal de música iTunes goza de gran éxito.

La nueva directora dijo que se seguirán ofreciendo emisiones en vivo en pantallas gigantes en la ciudad. En cuanto a las puestas en escena, Wagner precisó que la mayor parte del programa fue fijado salvo el ciclo de El anillo del nibelungo, de 2013, cuya dirección musical asumirá el ruso Kirill Petrenko y para el cual se busca un director artístico.

El ministro alemán de Cultura, Bernd Neumann, renovó el respaldo del gobierno a los tradicionales festivales. Este año el Estado federal aportará 2 millones de euros (2.77 millones de dólares) para cubrir un tercio de los gastos.

El dinero, sin embargo, no alcanzará para remozar el anticuado restaurante del festival, motivo de quejas por los visitantes de Bayreuth. Es una situación penosa, pero hay que ver lo positivo: funciona, comentó Wagner. La mayor parte de los fondos para trabajos de edificación serán empleados para construir un escenario.

También la mansión de los Wagner en Bayreuth, la Vi-lla Wahnfried, en la que solía entrar como uno más de la familia el dictador Adolf Hitler, necesita ser restaurada. El ministro de Cultura de Baviera, Wolfgang Heubisch, propuso que albergue muestras itinerantes en las que también sea tematizada la relación del festival con el nazismo.