En un operativo militar realizado en Baja California fue arrestado Filiberto Parra Ramos, La Perra, jefe de sicarios de una célula del cártel de Sinaloa que opera en Tijuana bajo las órdenes de Teodoro García Simental, El Teo.

La Perra es uno de los encargados del tráfico de drogas en Tijuana, está en el organigrama delictivo de las células que se escindieron del grupo de los hermanos Arellano Félix y tiene nivel similar al de Raydel López Udiarte, El Muletas.

La detención de Parra Ramos ocurrió aproximadamente a las 18 horas del miércoles pasado en un gimnasio de la exclusiva zona del Río, donde La Perra realizaba ejercicio y levantaba pesas, indicó una fuente consultada en las corporaciones policiacas.

El operativo se realizó después de una declaración de El Kaibil, agregó la fuente. Después de la captura se realizaron estudios al detenido en el cuartel Morelos, base de la segunda Zona Militar, y se decidió trasladarlo a la ciudad de México desde la base militar 70-76, aledaña al aeropuerto internacional de Tijuana.

El Teo, La Perra y El Muletas formaban parte de las células de los Arellano Félix, pero se apartaron de esta organización cuando llegó al poder Fernando Sánchez Arellano, El Ingeniero, y se unieron al grupo que lidera Joaquín El Chapo Guzmán, en septiembre de 2008.

En conferencia de prensa conjunta, las secretarías de la Defensa Nacional (Sedena) y de Marina, en coordinación con la Procuraduría General de la República (PGR), dieron a conocer que La Perra fue detenido por un grupo de reacción integrado por elementos de la segunda Zona Militar, con sede en Tijuana, e integrantes de las fuerzas especiales de la Fuerza Naval del Pacífico.

Activo participante en ejecuciones

Junto con Parra Ramos fueron detenidos César Daniel Moncayo Estrada, Luis Fernando Gastélum Guerrero y Alberto Espinza Ceniceros, informaron los subjefes operativos de Sedena y Marina, Luis Antonio Óliver Zen y José Luis Villalpando Caso, respectivamente.

Parra Ramos figura en la lista que publicó la agencia antidrogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés), en la que dio a conocer los nuevos rostros de los líderes del cártel de los Arellano Félix.

La Perra se separó de este grupo para sumarse al cártel de Sinaloa, específicamente a una célula que dirige Teodoro García Simental, bajo las órdenes de Ismael El Mayo Zambada García.

De acuerdo con el reporte militar, en 2008 en Tijuana, Baja California, se reportaron 749 ejecuciones, resultantes de la disputa entre Fernando Sánchez Arrellano y Teodoro García Simental. Parra Ramos es identificado como uno de los hombres más allegados a El Teo y uno de los más violentos, ya que participó activamente en las ejecuciones perpetradas por células de su grupo delictivo.

La información dada a conocer señala que La Perra está relacionado, entre otros casos, con la muerte de dos agentes federales adscritos a la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO), de la PGR, cuyos cadáveres fueron encontrados en el rancho Nazareno, en Tecate, Baja California, el 17 de abril de 2008.

La titular de la SIEDO, Maricela Morales, detalló que Parra Ramos está relacionado en al menos cuatro averiguaciones previas; existen órdenes de localización y presentación en su contra, así como una de aprehensión librada por el juzgado sexto de distrito con sede en Baja California, por delincuencia organizada.

Parra Ramos y los otros tres detenidos fueron trasladados en medio de fuerte dispositivo de seguridad, que incluyó un vehículo artillado, a las instalaciones de la SIEDO en la ciudad de México, donde rendirán declaración ministerial.