Representantes de los principales partidos políticos del país y líderes sindicales reiteraron su llamado a la ciudadanía para acudir a las urnas este 5 de julio y no favorecer al autoritarismo y el descrédito de las instituciones democráticas mediante el voto nulo o el abstencionismo.

La presidenta nacional del PRI, Beatriz Paredes, consideró que caen en actitudes de ingenuidad política quienes, aun de buena fe, emiten opiniones en contra del valor del voto ciudadano.

Indicó que en México prevalece un escenario en donde parecería que existe una convocatoria a que haya más mano dura, actitudes más severas, y si a ello se agrega (una campaña) para desacreditar el ejercicio del voto, la consecuencia no meditada es favorecer al autoritarismo.

Ante el auge de mensajes de diversos sectores, principalmente de usuarios de redes sociales en Internet y de analistas políticos para que los ciudadanos anulen su voto este 5 de julio, la dirigente del tricolor admitió que es válida la convocatoria a discutir si las instituciones democráticas son funcionales, o si los partidos políticos comprenden las expectativas de la sociedad.

Sin embargo, negar el valor del voto ciudadano, agregó, es contradictorio con una sociedad que ha luchado por democratizar a las instituciones.

A veces con actitudes de ingenuidad política se favorece a las posiciones autoritarias. En los países en donde no se vota, gana el autoritarismo, y también en aquellos en donde se desacreditan las instituciones democráticas, expresó.

Por su parte, Germán Martínez, dirigente nacional del blanquiazul, sostuvo que el movimiento por el abstencionismo es un desafío que tenemos todos los partidos y la clase política en su conjunto.

El líder panista señaló que debemos tener cuidado de no debilitar al Congreso, ya que con esto no gana nadie.

Admitió que el movimiento por el abstencionismo nos está obligando a que nuestros diputados rindan cuentas; nosotros le damos la bienvenida. Si este es el fondo del reclamo ciudadano, queremos control de los ciudadanos a los diputados, y relección en su caso. Pretendemos reducir la Cámara de Diputados de 500 a 400 (legisladores), y también el Senado, apuntó.

Sin equilibrio de la Cámara

Jesús Ortega, líder del PRD, insistió en acusar a la ultraderecha y al conservadurismo de estar detrás, y hasta mencionó que están insertos en algunos medios de comunicación.

El perredista insistió que hay intenciones perversas para descalificar el sistema pluripartidista, para contrarrestar campañas democráticas y lograr que se regrese al viejo régimen autoritario, donde gobernaba una sola persona sin el equilibrio de la Cámara de Diputados.

En nombre del PRI, Jesús Murillo Karam, secretario general, aseguró que su partido insistirá en sus llamados a sufragar.

Por su parte, los sindicatos afiliados a la Unión Nacional de Trabajadores (UNT) se manifestaron en contra del voto en blanco, y dijeron que no van a llamar a los trabajadores a anularlo. Añadieron que esto está siendo promovido por medios como la televisión, que ha visto afectados sus ingresos por el freno puesto a la publicidad electoral.

Representantes de los sindicatos de telefonistas, de la Universidad Nacional Autónoma de México, de pilotos de aviación y otras organizaciones, coincidieron en que esta es una campaña inducida por medios de comunicación a los cuales se les vio mermado el enorme negocio que significaban las campañas, y buscan incidir para que se discuta nuevamente la reforma electoral, con el propósito de modificar los aspectos que no les convienen económicamente.

Reconocieron, sin embargo, que también hay el componente del hartazgo de los electores, que ven una y otra vez cómo son incumplidas las promesas de campaña. El voto en blanco “es un reflejo claro del desencanto de los ciudadanos con el sistema de partidos, el poco avance de la democracia, los escándalos políticos y la corrupción, concluyeron.