En el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER) aún permanecen hospitalizadas 10 personas a causa de la influenza A/H1N1, ocho de los cuales están graves, informó el director del nosocomio, Rogelio Pérez Padilla, quien descartó que ya se haya normalizado la situación en la zona metropolitana del valle de México.

En entrevista, el especialista resaltó que el riesgo de infección persiste y es evidente todos los días en el INER, adonde diariamente llegan entre 20 y 30 personas con afecciones respiratorias, de las cuales tres o cuatro presentan síntomas de influenza, y podría tratarse de la causada por el nuevo virus.

Advirtió que el riesgo habrá pasado cuando dejen de llegar enfermos y de manera esporádica se tenga la necesidad de ingresar a alguno al hospital.

Mientras tanto, el reporte de la Secretaría de Salud (Ssa) sobre la situación de la epidemia por el virus A/H1N1 en el país indica que hasta ayer se tenían 4 mil 806 casos confirmados, lo que equivale a 265 más de lo reportado el lunes, lo que llama la atención debido a que la semana pasada el número de brotes que se agregaron cada día se ubicó entre 120 y 150, aproximadamente. Además, las nuevas confirmaciones reportadas por la Ssa se siguen ubicando en los días más críticos de la epidemia y los cercanos a la fecha en que se declaró la emergencia sanitaria (23 de abril) a causa del nuevo virus.

El 27 de abril, pico de la epidemia

Así, el pico de la influenza se localiza en el 27 de abril, cuando 353 personas empezaron con los síntomas. De acuerdo con la gráfica proporcionada por la dependencia, a partir de esa fecha el número de pacientes empezó a bajar, y en los días previos al 11 de mayo alrededor de 100 individuos se infectaban con la nueva cepa de la gripe.

Debido al tiempo que transcurre entre la toma de exudados faríngeo o nasal y su envío al Instituto Nacional de Diagnóstico y Referencia Epidemiológica (cuando menos seis días) para confirmar si se trata del virus A/H1N1, hay que esperar antes de tener información confiable sobre la situación de la epidemia en los pasados 15 días.

De acuerdo con el reporte de ayer, el caso más reciente se presentó el pasado día 22, y antes de éste hubo tres el 19.

Pérez Padilla subrayó que siguen llegando al INER casos sospechosos de influenza A/H1N1, entre tres y cuatro diarios, que presentan fiebre. Señaló que aunque en los días más críticos de la epidemia se llegaba a tener 10 ingresos al hospital, y en esta semana se registró un internamiento por día (lunes y martes), aún existe el riesgo de contagio de la nueva cepa.

Por otra parte, al contrario de lo que informó el titular de la Secretaría de Salud, José Ángel Córdova Villalobos, respecto a la gratuidad de la atención médica a enfermos de influenza A/H1N1, el director del INER dijo que no hay una comunicación oficial de la Ssa en ese sentido, por lo que administrativamente, a cualquier hospital se le dificulta eximir a los pacientes del pago por los servicios recibidos.

Comentó que el pasado lunes le confirmaron vía telefónica que procede la gratuidad de la atención clínica para los afectados por el nuevo virus. Sin embargo –insistió–, hace falta una comunicación por escrito.

Pérez Padilla mencionó que la erogación del INER en enfermos de influenza A/H1N1 puede ascender a entre mil 500 y 5 mil pesos diarios, dependiendo de la gravedad, y que por estudios socioeconómicos la mayoría de los usuarios están clasificados en las cuotas más bajas.

En cuanto a las 85 defunciones ocurridas hasta ayer en el país, el informe oficial destaca que ya son 16 las entidades donde se han reportado decesos. En los pasados dos días se sumaron –con una muerte cada uno– Jalisco y Tamaulipas, mientras Oaxaca pasó de dos a cuatro fallecimientos. El Distrito Federal concentra 52, lo que representa 61 por ciento del total.

De las personas que perdieron la vida también resalta que 45 eran mujeres (54.1 por ciento), y de éstas, la mitad (23) eran amas de casa, en tanto que 17 eran trabajadores independientes, 13 empleados privados, ocho estudiantes, seis menores de edad, seis comerciantes, cuatro profesionistas, tres empleados del sector público, tres desempleados y dos pensionados.

También se mantiene la tendencia a mayor cantidad de muertes en los adultos jóvenes; 76.5 por ciento tenían de 20 a 54 años.