Arañó la gloria. El olímpico mexicano Yahel Castillo se quedó a 2.5 centésimas de la perfección, al ejecutar el clavado más complicado de su repertorio. Los jueces le otorgaron 97.50 puntos a su salto inverso con dos y media vuelta y dos y medio giros, de 3.9 grados de dificultad.

Pero sólo le alcanzó para ganar la medalla de plata en el trampolín de tres metros, con un acumulado de 503.50 unidades, en la cuarta y última etapa de la Serie Mundial FINA-2009, que se llevó a cabo a puerta cerrada ayer en la Alberca Olímpica Francisco Márquez.

Y es que el imbatible campeón olímpico chino Qin Kay se quedó con el metal dorado, luego de la contundente demostración del dominio que tiene en la modalidad, al obtener una sumatoria de 510.75 puntos y arrasar con todo el oro de las cuatro fechas. El tercer sitio fue para el alemán Patrick Hausding (458.10).

Al terminó del primer salto Yahel se ubicó en la primera posición, pero en el segundo cayó hasta la cuarta, momento en el cual el monarca olímpico se apoderó de la cúspide. En el cuarto intento el jalisciense subió al segundo lugar y si bien prácticamente ya no tuvo que preocuparse de mantener la ubicación, remachó con su salto de fama mundial de 3.9 grados de dificultad, para afianzarse al cuello la plata. Obtuvo su mejor puntuación de la rutina: 97.50, aunque sólo pudo disfrutar del aplauso de unos cuantos.

En conferencia de prensa, el destacado competidor de 22 años dijo haberse sentido animado por la presencia de sus familiares y algunos amigos que pudieron permanecer en el escenario y no fueron desalojados por los organizadores, y agregó estar orgulloso de haber cumplido con la responsabilidad que tengo con mi país.

Sencillo, el ahora subcampeón FINA buscará corregir algunos errores que observó su entrenador Jorge Rueda, para llegar en mejores condiciones al Campeonato Mundial de la especialidad que se realizará en Roma, en julio próximo, adonde asistirán de 65 a 70 de los mejores del mundo o con aspiraciones serias de lograrlo.

En otro asunto, el ex clavadista Fernando Platas comentó que un certamen como el que se lleva a cabo en esta ciudad tiene un costo aproximado de 3 a 4 millones de pesos, pero hasta ayer consideró que pese a no poder vender más boletos y tener que regresar el importe a quienes los habían adquirido, las pérdidas serán mínimas.

La cuarta fecha de la Serie Mundial fue financiada por la Conade, la FMN y Platas Sport, además de otras empresas privadas que, según el delegado en Benito Juárez, Germán de la Garza, cada quien podrá absorber las pérdidas que se generen.

El cierre del serial se llevará a cabo este sábado, también a puerta cerrada, salvo que exista una nueva disposición por la contingencia sanitaria causada por el brote de influenza.