Muestra la forma en que embriones, fetos y niños pequeños desarrollan el mal: expertos
Permitirá comprender los mecanismos que subyacen en algunos tumores tempranos, comentan
Martes 21 de abril de 2009, p. 3
Washington, 20 de abril. Un grupo de investigadores descubrió una inesperada mutación genética que causa un tipo extraño de cáncer infantil precoz, y aseguró que representa todo un nuevo mecanismo para el desarrollo de la enfermedad.
Los expertos hallaron que los niños con una rara y agresiva forma de cáncer de pulmón llamada blastoma pleuropulmonar, o BPP, nacen con una mutación en el DICER1, gen controlador que ayuda a regular a otros.
Además, el equipo halló que los pequeños con BPP tenían células de apariencia normal en los pulmones que parecían hacer que las células vecinas se volvieran cancerosas.
Esta mutación nos dice la forma en que embriones, fetos y niños pequeños desarrollan el mal, cómo algo va mal
, dijo en entrevista telefónica el doctor Jack Priest, director investigador del Registro Internacional de BPP, en Minnesota.
Es una historia mayor que la del BPP. Sugiere una inducción al cáncer completamente novedosa
, añadió Priest.
Extraño mal
El BPP es tan extraño que sólo se diagnostica en 10 o 20 niños por año en Estados Unidos y en 50 o 60 en el mundo.
Identificado y tratado en un primer momento, el BPP tiene 90 por ciento de posibilidades de curación, pero los médicos pocas veces esperan encontrar un cáncer de pulmón en recién nacidos o niños pequeños.
Si no se trata correctamente, los chicos afectados sólo tienen 40 por ciento de posibilidades de supervivencia.
Los investigadores dijeron en una reunión de la Asociación Estadunidense para la Investigación del Cáncer, en Denver, que el hallazgo podría arrojar luz sobre los cánceres en adultos, pero permite comprender los mecanismos que subyacen en algunos tumores infantiles tempranos.
Algunos de estos niños nacieron con BPP
, dijo Priest, quien añadió que uno de los pequeños que participaron en el estudio mostraba quistes en los pulmones desde antes de nacer, según las pruebas de ultrasonido practicadas durante la gestación.
La doctora Ashley Hill, del Centro Médico Infantil Nacional en Washington, y sus colegas analizaron muestras de ADN de 49 personas de cuatro familias.
Alrededor de 40 por ciento de los casos fueron diagnosticados en niños cuyas familias tienen antecedentes de algún tipo de cáncer, lo que sugiere que puede haber una causa genética heredada.
Los investigadores se sorprendieron de hallar la mutación en el DICER1.
Células aparentemente normales
Las personas con las mutaciones en el DICER1 tenían el defecto en cada célula del cuerpo, pero Hill halló otro hecho inusual. Células pulmonares aparentemente normales, que portaban una forma aún más severa de la mutación, eran las que parecían enloquecer a las adyacentes y formar tumores.
El siguiente paso es intentar desarrollar un análisis para la mutación del DICER1 que pueda usarse para comprobar si los niños nacidos en familias de alto riesgo la portan, y por tanto están en peligro, dijo Priest.