Reciben además incrementos de 2 por ciento de ayuda a transporte y de 1.5 para despensa
Sindicato y empresa discrepan sobre alza global y cumplimiento del acuerdo de productividad
Martes 17 de marzo de 2009, p. 17
El Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) aceptó un incremento salarial directo de 4.9 por ciento y de dos al rubro de ayuda de transporte, así como de 1.5 al de despensa, con lo que se evitó la huelga en Luz y Fuerza del Centro (LFC), emplazada para ayer a las 12 horas.
Tras difíciles horas de negociación la víspera –empresa y sindicato discutieron los porcentajes durante la noche del domingo y la madrugada del lunes–, la firma de convenio salarial 2009-2010 llegó apenas tres horas antes de que los trabajadores habían programado colocar las banderas de huelga.
Luego del protocolo de la firma, la controversia se dio por el porcentaje total de incremento.
El SME informó que, en términos reales, el aumento global a los trabajadores fue de 7.25 por ciento, ya que no se suman los porcentajes, pues los ajustes al salario no impactan igual que a las prestaciones.
Sin embargo, el director de LFC, Jorge Gutiérrez Vera, sostuvo que en realidad el aumento es de 5.86, porcentaje en el que se verán elevados los ingresos de los trabajadores.
La controversia no paró ahí, ya que el líder del gremio, Martín Esparza Flores, defendió que los obreros sí han cumplido con los compromisos de productividad firmados el año pasado, pues se facturaron más de 50 mil millones de pesos de ventas y se recuperaron mil millones de pesos de empresas que no pagaban la luz.
Hizo esa defensa porque la secretaria de Energía, Georgina Kessel, sostuvo que no habían logrado las metas de productividad convenidas para 2008.
Entrevistado tras la firma del convenio salarial, el dirigente expuso que el aumento de 7.25 por ciento
es un avance importante respecto del tope
de 4.5 impuesto por el gobierno para las revisiones de este año.
Rechazó que el costo laboral de la empresa sea una carga, ya que los salarios y prestaciones de los trabajadores y jubilados representan 25 por ciento del total de ventas, y aseguró que se han cumplido 93 por ciento de las metas de productividad, además de que se elevó el número de usuarios atendidos a 6 millones 113 mil.
Robo de cables por $220 millones al año
A su vez, Gutiérrez Vera apuntó que la entrada del secretario del Trabajo, Javier Lozano, a la mesa de discusiones fue determinante para destrabar el conflicto.
Indicó que en lo que se refiere a productividad, hay algunos indicadores donde se ha cumplido, y otros donde nos hemos quedado por debajo de la meta
.
También explicó que el déficit permanente con que opera esta paraestatal se debe en gran parte a que la Secretaría de Hacienda es la que fija el costo del servicio para los usuarios y determina el precio en que se compra la energía a la Comisión Federal de Electricidad.
Además, la situación económica de LFC está afectada por indicadores como los porcentajes de cobranza y el robo de energía eléctrica, por lo que incluso se ha pedido la creación de una fiscalía especial para que atienda todos estos casos.
El cuadro se completa porque se está dando otro fenómeno, que es el robo diario de más de 2 kilómetros de cables de cobre, lo que representa unos 220 millones de pesos al año, además de que se afecta el servicio a los usuarios, abundó.
En tanto, el secretario Javier Lozano comentó que esta negociación ha sido la más difícil
que le ha tocado atestiguar en el SME; sin embargo, se congratuló de que en este acuerdo prevaleció la responsabilidad y madurez
del sindicato, lo que conjuró la huelga.
Sostuvo que ahora las dos partes deberán cumplir con el convenio de productividad y trabajar para mejorar las finanzas de esta empresa pública.