Villa Mainero, Tamps., 25 de febrero. Andres Manuel López Obrador calificó de circo la reunión del gabinete de seguridad pública en Ciudad Juárez, porque es pura demagogia, ya que después de toda la faramalla que hizo el equipo de Felipe Calderón los habitantes de ese municipio fronterizo seguirán desprotegidos, porque el problema de la violencia y la criminalidad sólo se resolverá con un cambio radical en la política económica.

En la plaza principal de este municipio, ya casi deshabitado porque la mayoría de los habitantes emigró por el desplome del campo, el tabasqueño insistió en que no podrá atacarse la delincuencia organizada y el clima de inseguridad mientras la mayoría de los mexicanos viva en la miseria y el desempleo.

Acusó a Calderón de mentir e incumplir sus promesas de campaña. El autonombrado presidente del empleo, explicó, no sólo no ha creado nuevas plazas sino que en los dos años y medio que lleva en Los Pinos ha provocado que diariamente 870 mexicanos pierdan el trabajo.

Al iniciar ayer su última gira por Tamaulipas, con la que concluirá su recorrido por los municipios de la entidad, López Obrador expuso que el hecho de que el gabinete de seguridad de Calderón se haya reunido en Ciudad Juárez es sólo escenografía, porque los funcionarios llegaron blindados, protegidos y se regresaron después para dejar a la gente de esa ciudad chihuahuense sin ninguna protección, en manos de las bandas criminales.

¡Señoras y señores, el circo del pelele de Calderón, en Ciudad Juárez¡, exclamó entre gritos de respaldo de sus simpatizantes reunidos en la plaza principal. Les dijo que la inseguridad y la violencia que reina en el país no se acabará con aumentar las penas, crear más cárceles o sacar más soldados y policías a las calles, como pretende el gobierno usurpador.

Lo que se requiere con urgencia, sostuvo, es un viraje en esa estrategia económica que sólo ha beneficiado a una minoría, porque desde hace varias décadas el presupuesto se utiliza para apoyar a banqueros y grandes empresarios, a la mafia de la política.

Por eso, los responsables de que el país se esté descomponiendo son Carlos Salinas de Gortari, Vicente Fox, Roberto Hernández y Felipe Calderón, ya que han actuado como verdaderos delincuentes, acusó..

López Obrador recorrió también los municipios de Villagrán, Hidalgo y Güemez, en los cuales advirtió a sus simpatizantes que se gastan más de 70 mil millones de pesos en comprar alimentos, gasolina y diesel del extranjero en lugar de producirlos aquí y de reactivar el campo y la industria, a pesar de que el nivel de desocupación es cada vez mayor.

En Villagrán, después de escuchar al ex edil Pedro Torres, señaló que han cerrado todas las opciones a los hombres del campo y pretenden comprar su voto con un lonche, pero sólo las vacas, los bueyes y los borregos se venden.

El presidente legítimo advirtió que Calderón pasó por encima de todas sus promesas de campaña. La situación está como para decirle a los que lo apoyaron o a quienes se dejaron engañar por sus espots: ¡Tengan para que aprendan, ahí están sus empleos!

Al cerrar la jornada de ayer en Güemez, sostuvo que es un insulto a la mayoría de la población que en tiempos de crisis y miseria los consejeros del Instituto Federal Electoral se hayan incrementado sus sueldos a 350 mil pesos y los ministros de la Suprema Corte superen el millón de pesos.

Es casi el doble de lo que gana el presidente de Estados Unidos, Barak Obama, y más discutibles son esos salarios millonarios si se considera que consejeros y ministros son alcahuetes de la mafia de la política.

Por la mañana, en entrevista, señaló que la actuación de los integrantes del IFE y de la mayoría de ministros de la Suprema Corte le da la razón en aquella frase que tanto le criticaron en 2006: Al diablo con sus instituciones.