Hecho de roca y no de gas caliente o hielo, sería el segundo mundo habitable, predice
De acuerdo con estudios realizados por la Agencia Espacial Europea y la NASA se determinará cuántos existen y se comenzará la búsqueda de aquellos en los que hay vida, comenta astrónomo de Estados Unidos
Miércoles 18 de febrero de 2009, p. 2
Chicago. En los próximos cuatro años podría descubrirse el primer planeta semejante a la Tierra orbitando una estrella, según un destacado astrónomo. Se cree que ninguno de los 300 planetas extrasolares
identificados hasta ahora más allá de nuestro sistema es apropiado para la vida, así que el hallazgo de un planeta semejante al nuestro, hecho de roca y no de gas caliente o hielo, incrementaría significativamente las posibilidades de encontrar el segundo mundo habitable.
El domingo pasado, un astrónomo estadunidense predijo con confianza que pronto se anunciará el descubrimiento de un planeta semejante a la Tierra, posiblemente en la zona habitable
, propicia a la existencia de agua, alrededor de una estrella cercana, luego de estudios realizados por satélites de la Agencia Espacial Europea (AEE) y la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA), de Estados Unidos.
En el curso de los próximos tres o cuatro años habrá una conferencia de prensa en la sede de la NASA y nos dirán con cuánta frecuencia ocurren planetas como la Tierra. Y una vez que nos enteremos de eso, sabremos cómo dar los pasos siguientes en la búsqueda de planetas habitables
, aseguró Alan Boss, del Instituto Carnegie de la Ciencia, con sede en Washington.
Me parece inevitable que existan planetas semejantes al nuestro. Sospecho que cada estrella que miramos en la noche tiene un planeta así dándole vuelta. Ya sabemos que la mayoría de las estrellas tienen planetas
, expresó el doctor Boss ante la Asociación Estadunidense para el Avance de la Ciencia, en Chicago.
Hemos encontrado planetas que tienen varias veces la masa de la Tierra orbitando estrellas de masa menor que el Sol. Si bien no son análogos a la Tierra, cada vez son más parecidos. El hecho de que podamos encontrarnos implica que apenas vemos la punta del iceberg
, añadió.
Los científicos creen que una de cada tres estrellas semejantes al Sol en la Vía Láctea cuenta con planetas varias veces mayores que la Tierra. El doctor Boss señaló que la cifra de planetas más pequeños podría ser mayor. Creo que hablamos de un número muy cercano a un planeta del tamaño de la Tierra alrededor de cada estrella parecida al Sol
, sostuvo. Esto significaría que podría haber 100 mil millones de planetas parecidos al nuestro nada más en nuestra galaxia, y existen por los menos 100 mil millones de galaxias en el universo.
Lo que vamos a encontrar es que el número de Tierras es bastante grande, y eso nos dirá dónde construir los próximos telescopios para salir y examinar esos hallazgos
, vaticinó.
Hoy día, los telescopios afianzados al suelo sólo son capaces de detectar planetas sustancialmente mayores que la Tierra, es decir, planetas gaseosos gigantes
, como Júpiter, o colosos helados como Neptuno; ambos son inhóspitos para la vida.
Ahora, por primera vez será posible identificar planetas rocosos con dos telescopios emplazados en el espacio: el Corot, de la AEE, que comenzó a recabar datos el año pasado, y la misión Kepler de la NASA, cuyo lanzamiento está programado para el mes próximo.
“Me parece –expresó Boss– que quedaríamos absolutamente pasmados si Kepler y Corot no hallaran planetas semejantes a la Tierra, porque de hecho ya los encontramos, así que no creo posible que tal cosa ocurra.”
Serían 100 mil millones
La sugerencia de que existan tantos como 100 mil millones de planetas semejantes al nuestro en la galaxia, de los cuales una fracción considerable orbitarían dentro de la zona habitable donde existe agua líquida, significa que la vida extraterrestre es inevitable, manifestó el doctor Boss en la reunión.
“Si tenemos un mundo habitable que lleve cuatro, cinco o 10 mil millones de años girando en torno a una estrella, ¿cómo vamos a impedir que forme vida? Es como tomar un refrigerador, desconectarlo, cerrar la puerta y regresar dos meses después; nos asombrará lo que encontremos creciendo allí –señaló–. Eso es la vida: la analogía del refrigerador puede no ser igual que el origen de la vida, pero la vida es tenaz: es difícil de detener. Si hay por allí un planeta con la temperatura adecuada y que ha tenido agua durante un millón de años, algo saldrá de ahí.”
Con todo, encontrar un planeta con vida no es lo mismo que descubrir vida inteligente. Es bastante más difícil calcular la probabilidad de hallar vida inteligente, tal vez porque ésta, según creemos, sólo existe durante una fracción del tiempo en que un planeta es habitable
, advirtió Boss.
¿Realmente creen ustedes que nuestra civilización durará mil millones de años?
, preguntó. Ésa es la escala temporal que utilizamos en astronomía. No creo que dentro de mil millones de años sigamos aquí. Por otra parte, existen algunas razones prácticas por las cuales tal vez no hemos hallado vida inteligente. Tal vez no la hemos encontrado porque no hemos mirado lo bastante lejos en la galaxia, ni durante el tiempo suficiente.
© The Independent
Traducción: Jorge Anaya