Festeja cuatro décadas de andar en el rocanrol con un álbum de tres discos
Mi éxito ha sido más humano que comercial... Si te la crees mucho y te tomas muy en serio nunca vas a estar satisfecho, comenta en entrevista
Las groserías no han sido la fórmula
Martes 17 de febrero de 2009, p. 9
“La fórmula del porqué El Tri ha permanecido 40 años rocanroleando y no ha perdido su identidad, su carisma, es que siempre nos ha valido madres. Si tú te la crees mucho y te tomas muy en serio estás jodido, porque nunca vas a estar satisfecho.
Si tienes la intención de llegar a ser muy acá, como los Beatles, o algo así, nunca lo vas a ser y vas a quedar frustrado. He conocido a mucha gente así. Si no pretendes nada, puedes disfrutar lo que llegues a ser o tener. La felicidad no es tener todo lo que quieres, sino querer todo lo que tienes
, aseguró Alex Lora, en entrevista para La Jornada por el festejo de las primeras cuatro décadas de andar de rocanrolero, que incluirá un álbum de tres discos, con nuevas versiones de sus más grandes éxitos, titulado Alex Lora, de El Three a El Tri, Rolas del alma, mi mente y mi aferración.
A principios de los años 60, el joven José Alejandro Lora Serna, hoy Alex Lora, nacido el 2 de diciembre de 1952 en Puebla, cerró los ojos y como en un acto de contrición rezó y pidió a la Virgen de Guadalupe que un día lo hiciera roncanrolero. La Morena del Tepeyac le hizo el milagro y a 40 años de andar tocando esta música para locos
el eterno chavo de onda reitera que la clave para seguir hasta ahora es que nunca hemos tenido aires de grandeza
.
Las nuevas versiones gustaron
A la banda (sus seguidores), aseguró, le han gustado las nuevas versiones
. Informó que los dos primeros cedés del álbum de aniversario son de canciones clásicas; mientras el tercero, Nada que perder, es de nuevas. Viene Ya lo sé, tema de la película Cómo no te voy a querer, que trata de las porras futboleras de los Pumas de la UNAM; también, La raza indocumentada, en la que se habla de la cocinera mexicana de la Casa Blanca, que le preparaba sus huevos a Bush
.
Recordó que hace 40 años el Three Souls in My Mind daba conciertos en sitios como el auditorio Che Guevara, en Ciudad Universitaria, donde había magia. Ésta es la palabra, pues por esto el grupo sigue vigente, por su valemadrismo, que sigue siendo exactamente igual
. Mientras charla toca su lira, viejas tonadas.
En las tocadas suele cotorrear con la raza. Se hablan como si se conocieran de toda la vida. Sienten confianza conmigo como con cualquiera.
El rocanrol, afirmó, es como el beisbol: mientras más sabes, te das cuenta de que menos sabes. Si ya llevo tiempo cantando les digo que ya me mienten la madre. ¡Es una catarsis, un desahogo!
–¿Qué es la banda para Alex Lora?
–El público, la raza, la banda de El Tri es la que ha hecho su música y la ha mantenido en su corazón. El público ha musicalizado su vida con mis canciones y ha hecho de ellas sus himnos, porque no es una música que la escuches cuando subes al pesero o en el centro comercial. La raza la ha pasado de boca en boca. Mi éxito ha sido más humano que comercial.
“Del nuevo disco, la rola que más les ha gustado es ¿Por qué no te largas?, que habla de un chavo que le dice a ella que antes de conocerla él era muy feliz.”
–¿Ha habido gente a la que no le guste la música de El Tri?
–¡Claro! Una vez, y eso fue histórico, después de una tocada que hicimos con El Antiguo Testamento, allá por 1969-70, nos fuimos al Centro Libanés. Eran unos 15 años y todos estaban de traje. El que coordinaba ahí nos preguntó: “Oigan, ¿y sus uniformes?
“Empezamos a tocar y como en la segunda rola llegó un señor y nos dijo: ‘¿Cuánto se les debe?’ Preguntamos que por qué. ‘Aquí está lo que se les debe y sáquense a la chingada’.”
–¿Cuál es la importancia de las groserías en su música?
–Si no hablas a la gente como ella lo hace, a lo mejor no van a entender lo que se intenta decirles. Lo de las groserías no fue un estereotipo o una fórmula.
–¿Qué significa la Virgen de Guadalupe para usted?
–Es mi ángel de la guarda. Cuando estaba chavo le pedía que me diera la gracia de ser rocanrolero. Me lo concedió.
–¿La política y los políticos?
–Después del festival de Avándaro, cuando se vino la represión para las tocadas y nacieron los hoyos funky, bautizados así por Parme, que eran tardeadas, hice una canción, ¡ah!, el más cabrón fue Echeverría, varias canciones sobre los abusos de autoridad.
–¿Respecto de la amista
–Bueno, sólo Alfredo Díaz Ordaz, que en paz descanse. Cuando grabamos el disco Otra tocada más, lo hicimos en su estudio, en Los Ángeles. Se suponía que él iba a ser el director artístico.
“Era el productor y como al tercero o cuarto día de grabación llegó con una güerota. Le dije: ‘¿No que eres el productor? Tienes que estar aquí todo el tiempo. Si no vienes te voy a hacer otra cancioncita. Después acudió todo el tiempo, aunque no hizo nada, pero allí estuvo.”
Lora aseguró: “Gracias al rocanrol he conocido personas que de otra manera nunca las hubiera conocido, de la polaca, del deporte, o a los intelectuales, a la raza. Si no fuera por el rocanrol nunca hubiera cotorreado con Chuck Berry, con los Rolling, con Carlos Santana, o nunca me hubiera tomado un tequila con Ron Wood y Richards.
“Hemos tocado dos veces con los Rolling Stones. Lo que más les impresionó fue que la raza nos pedía otra rola. Nos decían: ‘Cuando Guns N’ Roses, AC/DC, Prince, Metallica han tocado con nosotros antes de que terminen su turno les gritan ¡fuera! ¡Ya queremos a los Rolling!’
Ya les pidieron otra rola, decían, y se preguntaban: ¿quiénes son estos güeyes?
¡Es El Tri de México, señores!
, dijo Lora.