■ “El único acuerdo, que liberen a secuestrados”: Álvaro Uribe
Ordena el mandatario de Colombia intensificar ofensiva contra las FARC
Bogotá, 13 de febrero. El presidente colombiano, Álvaro Uribe, ordenó intensificar a partir de hoy la ofensiva militar contra las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), con el fin de lograr la liberación de 22 militares y policías en manos de la guerrilla, luego de que el jueves descartó la propuesta rebelde de canjear a los uniformados por unos 500 insurgentes encarcelados.
“Quiero decir a los colombianos que a partir de hoy, con el ejército y la policía, intensificaremos la presión sobre los secuestradores terroristas de las FARC hasta que liberen a nuestros soldados y agentes”, declaró el mandatario, luego de que tras la reciente liberación del político Alan Jara había dicho que estaba “listo” para hablar del canje e incluso iniciar un proceso de paz con la insurgencia.
“El único acuerdo humanitario que se acepta es que liberen unilateralmente y de inmediato a todos los plagiados”, advirtió Uribe la víspera, después de que la semana pasada las FARC liberaron a tres policías, un soldado y dos políticos y llamaron a “persistir” en el intercambio por conducto de la senadora opositora Piedad Córdoba.
Más aún: el asesor presidencial José Obdulio Gaviria aseguró que unos 125 insurgentes presos planean renunciar a las FARC y acogerse a una ley de beneficios jurídicos, la cual establece una pena máxima de ocho años de cárcel.
Desconcierto
Los ex congresistas Orlando Beltrán y Luis Eladio Pérez, liberados hace un año por el grupo rebelde, en declaraciones por separado se mostraron desconcertados por el nuevo anuncio del presidente. Beltrán dijo que esto hace que los rehenes y sus familiares “estén pasando sus peores momentos”, mientras Pérez expresó que “pareciera que los uniformados no tienen valor para el gobierno”.
Mientras, el presidente de la Conferencia Episcopal, monseñor Rubén Salazar, pidió “no cerrar las vías del diálogo”.
En París, la Federación Internacional de los Derechos Humanos condenó las matanzas de indígenas awá en Colombia y llamó al relator especial sobre pueblos indígenas de Naciones Unidas a pronunciarse. De hecho, la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados reiteró su llamado a que se investiguen esos hechos, atribuidos a las FARC.