■ La cinta del español Chema Rodríguez fue bien recibida
Documental proyectado en el festival de Berlín reivindica la figura del coyote
Ampliar la imagen La actriz estadunidense Michelle Pfeiffer presentó en el encuentro su película Cheri Foto: Ap
Berlín. 10 de febrero. El coyote, ese oscuro personaje que “ayuda” a los migrantes centroamericanos a cruzar la frontera para llegar a Estados Unidos, quedó reivindicado en el documental del mismo nombre, que el cineasta español Chema Rodríguez presentó ayer en la Berlinale. La cinta recibió buenas críticas por parte de la prensa y del público del festival.
Maco es un albañil que la hace de coyote en Guatemala para llevar centroamericanos a Estados Unidos. El documental deja claro que si el paso hacia Estados Unidos es difícil, cruzar la República Mexicana es un jardín de rosas pero lleno de espinas. Queda al descubierto la corrupción de las autoridades mexicanas a la hora de detener a los indocumentados.
Las mordidas, después la cuota
Según el director Chema Rodríguez, los policías y guardias fronterizos de México tienen que cumplir una cuota de migrantes centroamericanos para detener y expulsar a sus países, pero después cobran mordidas, y todo el mundo lo sabe; el resto es una mascarada.
El pago por ir desde Guatemala hasta la frontera con Estados Unidos es de alrededor de los 6 mil dólares por persona y se lleva a cabo en el transcurso de hasta tres semanas, según la cinta.
Ante las cámaras algunos militares mexicanos se esforzaban por mostrar sus mejor cara o una fidelidad firme a sus principios morales, dijo el realizador.
Maco presentó al director y a los productores del documental con 25 personas en espera de ir en busca del sueño americano, de ellas escogieron a los tres que reaccionaron mejor ante las cámaras. fue así que se inició el viaje.
“Entre los mexicanos y los migrantes centroamericanos se da a veces una guerra: pobres que asaltan a pobres. Sin embargo, también hay gente solidaria que los ayuda. Dejando fuera las áreas de conflicto, creo que la ruta de Guatemala hasta México es uno de los escenarios más peligrosos del mundo”, aseguró el realizador español.
La idea de la producción de este documental surgió de Maco, el coyote, quien al final del largometraje afirma: “Siempre quise escribir un libro para contar mi vida y mis aventuras, pero como la gente no lee, hago una película”.
“Nunca he abandonado a mis gentes”, dice
En la cinta, Maco es el dueño de la escena, amenizada por la música de mariachi y la que surge de las rocolas. De figura regordeta, el coyote, luego de confesarse alcohólico, muestra preocupación por el bienestar de sus clientes. Dice: “Nunca he abandonado a su suerte a ninguna de mis gentes”.
Asegura que se ve en la necesidad de proveer de documentos falsos a sus clientes, los centroamericanos, a los que hace pasar por mexicanos para lo cual les ayuda a cambiar el acento, les da lecciones de geografía e historia de México y a cantar el Himno Nacional.
Maco no pudo asistir a la presentación de Coyote, en la Berlinale, pese a que las autoridades guatemaltecas estaban dispuestas a pagar el pasaje a Berlín, debido a que todos sus documentos eran falsos.