■ Góngora Pimentel apela al buen juicio para acatar sus disposiciones
Los cambios a la Constitución afectan más derechos de trabajadores: juristas
En el 92 aniversario de la Constitución, la Unión de Juristas de México (UJM) señaló que con las más de 500 modificaciones que se le han hecho, “la Carta Magna se muere debido a que las reformas al texto original han cambiado reaccionariamente su contenido, siendo los derechos laborales los más afectados”.
En entrevista, Eduardo Miranda Esquivel, presidente colegiado de dicha agrupación de litigantes laborales, indicó que la UJM considera “inadecuada y perjudicial una reforma laboral en medio de la crisis, como promueven la Secretaría del Trabajo y Previsión Social y los senadores panistas, porque la intención es flexibilizar las condiciones de trabajo y anular importantes derechos de los trabajadores mexicanos”.
Apuntó que con el paso del tiempo la Constitución también “ha dejado de cumplirse, para convertirse en un adorno para los gobiernos neoliberales. Incluso, la parte benéfica para el pueblo no se cumple o no se puede ejercer, por no existir la reglamentación que lo permita, como es el caso de los derechos al trabajo, a la salud, a la vivienda y a la seguridad social”.
Aseguró que en el ámbito laboral la Carta Magna se incumple en materia de salarios, empleo, condiciones generales de trabajo y derechos colectivos de huelga, contratación colectiva y libre ejercicio de la libertad sindical, porque al haber un salario mínimo miserable, alejado del salario remunerador que establece el texto de 1917, más de 2 millones de desocupados, 60 millones de pobres, entre otras circunstancias, es evidente que el texto constitucional no se aplica”.
Sostuvo que desaparecer o limitar la legislación del trabajo con el “pretexto de una reforma laboral anularía los derechos de estabilidad en el empleo, salario remunerador, jornada razonable, contratación colectiva, huelga y libertad sindical, lo que sería contrario a los postulados del constitucionalismo social de 1917”.
Miranda Esquivel sostuvo que la Carta Magna “ya no refleja el proyecto de nación del Constituyente de 1917 ni las nuevas aspiraciones populares”, por lo que “la crisis, las políticas neoliberales del gobierno federal y el estado agónico de la Constitución nos exigen hacer un esfuerzo de unidad para movilizarnos y exigir nuestros derechos”.
Por su parte, el ministro Genaro Góngora Pimentel, al dictar una conferencia magistral a perredistas, en el 92 aniversario de la Carta Magna, se pronunció por fortalecer la cultura del derecho en México y apeló al “buen juicio” de las fuerzas políticas y sociales para cumplir con responsabilidad lo que determina la Constitución.
Góngora Pimentel consideró que aún queda pendiente la deuda de la República con los que menos tienen, a quienes “sólo podremos decir que son ciudadanos verdaderamente libres cuando cuenten con los mínimos de bienestar que garantiza nuestra Constitución”.
Resaltó que los momentos que atraviesa el país “no son cómodos ni fáciles, pero debemos mantener el pulso necesario para sortear escollos y dificultades (...) Sólo si postergamos nuestros egoísmos y personalismos a la consecución del bien común conseguiremos desterrar para siempre las divergencias irreconciliables, el rencor, el odio y la violencia, y lograremos un México unido en sus deseos de paz y armonía”.
Ante esa su intervención, Jesús Ortega, presidente nacional del sol azteca, señaló que la clase política manifiesta incapacidad. “Tenemos que reconocerlo para avanzar en los grandes cambios que necesita el país. “Precisó que, sin duda, a esa incapacidad contribuyen intereses egoístas y pasiones sectarias”.