■ Pese a su estrecha relación con la nación gala, Amat Escalante lamentó no iniciar en su país
Estrenan Los bastardos en cines de Francia antes que en México
■ Premiada como mejor largometraje en el festival de Morelia, se presentará en salas nacionales en marzo
■ La cinta se vendió a Grecia, Canadá y Benelux; irá al encuentro fílmico en Rotterdam
Ampliar la imagen En la imagen, de derecha a izquierda, Jesús Moisés Rodríguez, protagonista de Los bastardos; Amat Escalante, y el cineasta Carlos Reygadas, en el pasado festival de Morelia Foto: Archivo
París, 30 de enero. La película mexicana Los bastardos, de Amat Escalante, llegó por primera vez esta semana a los cines comerciales al estrenarse en Francia antes que en México, lo que lamenta el director, ya que prefería que se lanzara en su país.
El segundo largometraje de Escalante, descubierto en Cannes por su primera película, Sangre, transcurre en la ciudad de Los Ángeles, y tiene como protagonistas a dos mexicanos que se buscan la vida con subempleos, hasta que un día un hombre los contrata para que maten a su esposa.
Amat Escalante empezó a trabajar el guión hace años con su hermano Martín; le incorporaron anécdotas de la familia (su padre cruzó la frontera como indocumentado y guarda secuelas en las manos), pero ante todo quería confrontar al espectador con la muerte, fortuita y resultante de una venganza fría.
Como en su primer largometraje, el joven director mexicano filma secuencias muy largas, escenifica grandes silencios y da una visión irreal de la vida diaria de sus protagonistas, hasta que dos tiros a quemarropa ponen la piel de gallina por su crudeza, escena que quedará grabada en la memoria y que numerosos carteles publicitarios evocan en las calles de París.
“Las comparaciones no ayudan”
Escalante sigue con la mezcla de actores profesionales y otros que no lo son, de físicos muy contrastados y notables presencia, al estilo de lo que hace su compatriota Carlos Reygadas, del que fue ayudante en varias películas.
“La comparación es un poco molesta. En cierto momento nos inspiró mucho Bresson, y eso nos hizo trabajar con no actores; tenemos los mismos gustos en cuanto a películas, y estamos los dos en México, pero el tiempo nos irá separando”, resume Escalante en París.
“Hago lo que me dice la inspiración y quiero cambiar poco a poco mi estilo, tratar de no preocuparme de lo que puedan decir, aunque a veces las comparaciones fáciles con Reygadas, Haneke o Dumont no ayudan a la película”, reflexiona.
Hablando de gustos cinematográficos, los suyos son eclécticos. “La primera película que me fascinó fue El mago de Oz, cuando era muy pequeño; La naranja mecánica, a los 15 años, y Los olvidados, de Buñuel; Aguirre, la cólera de Dios, y otras de Werner Herzog; así como Metrópolis y M, de Fritz Lang; Charles Chaplin.”
Tampoco quiere olvidar a Bresson, porque “su libro y sus películas me emocionaron, así como Bergman y Woody Allen, o Sergio Leone, porque Los bastardos tiene inspiración en El bueno, el malo y el feo”.
Los bastardos, galardonada como mejor largometraje nacional en el festival de Morelia el pasado octubre, se estrenará en marzo próximo en México, con apoyo de Canal 22.
Relación privilegiada
Tiene una espinita clavada, porque hubiera preferido estrenar primero en su país. Pero Escalante mantiene una relación privilegiada con Francia. Sin estar terminada, Sangre arrancó su singladura en Cine en Construcción, foro profesional celebrado en Toulouse en 2005, y de allí dio el salto al festival de Cannes, que más tarde lo invitó a su residencia de cineastas jóvenes de París. Allí escribió el guión de Los bastardos, que contó con un importante coproductor francés, Jean Labadie, y también fue invitada a la sección oficial Una Cierta Mirada, del Festival de Cannes en 2008.
La película se vendió a Grecia, Canadá y Benelux, e irá al festival de Rotterdam. Mientras, Escalante trabaja en un proyecto colectivo de una decena de ficciones de 10 minutos, inspiradas en la Revolución Mexicana, junto con Carlos Reygadas, Fernando Eimbcke, Rodrigo Plá, Gerardo Naranjo, Patricia Regan, Diego Luna y Gael García Bernal. “En mi caso, va a ser actual, con un sacerdote y dos niños, pero puede ser que cambie”, de aquí al rodaje, previsto en abril, en Guanajuato, adelantó.
También está escribiendo su próximo proyecto. “Estará filmado en México y será contemporáneo”, dice entre risas, porque no quiere hablar más, por aquello de la mala suerte.