■ “No se hacen atletas de la noche a la mañana”
Faltan planes deportivos, advierte Raúl González
Hace 17 años, el entonces presidente de la Comisión Nacional del Deporte, Raúl González Rodríguez, prometió que México ganaría 12 medallas en Barcelona: regresó con una sola presea y una renuncia que no fue aceptada, pero caro pagó la factura al ceder el alto rendimiento al Comité Olímpico Mexicano, dirigido por su antagonista Mario Vázquez Raña.
La película se repite ahora con la administración de Carlos Hermosillo, director general de la Conade, en la que se vaticinan una docena de preseas olímpicas en Londres 2012 y 40 de oro en la justa continental de Guadalajara 2011, sin que se conozcan programas de la institución desde que el ex futbolista arribó al cargo, hace dos años, y se ha dedicado a pregonar presupuestos millonarios, dice el ex marchista y doble medallista olímpico.
Más allá de las expectativas y los buenos deseos que se tienen para el deporte mexicano, afirma que no se ha aprendido de la historia deportiva del país ni de otras naciones y sólo se está improvisando, cuando “se debe trabajar mucho desde abajo”.
Abordado en el COM, González Rodríguez señala que hasta el momento la Conade no tiene proyectos ni planes para fundamentar los logros deportivos que vaticina.
“No veo ningún programa a los Juegos Panamericanos de Guadalajara, mucho menos a los Juegos Olímpicos de Londres, más que tareas de organización y mucho dinero para el comité organizador, eso sí.
“Brasil se preparó seis años antes; China y España (sedes veraniegas de Pekín 2008 y Barcelona 1992) jamás pensaron en la fiesta, sino en los protagonistas, que son los atletas y los programas deportivos”, sostiene el primer directivo que fue presidente de la Conade y la Confederación Deportiva Mexicana en la gestión de Carlos Salinas de Gortari.
–¿Tres años son suficientes para conseguir el mejor resultado en la historia del deporte local?
–¿Para Londres? ¡Por favor! No se hacen atletas de la noche a la mañana. Hay deportistas que apenas están figurando al nivel de la elite y esa es la base con la que se puede trabajar.
“No es que sea pesimista ni negativo ni que esté descalificando todo. Simplemente señalo las cosas que por la experiencia creo que a veces no están bien enfocados o creo que no saben hacer”.
–¿Usted pronosticó que se ganarían 12 medallas en Barcelona 1992?
–Yo no pronostiqué, dije que habían posibilidades, porque teníamos con un año de antelación a campeones y recordistas mundiales, pero sabemos que no siempre se da.