■ El proyecto sólo generará 250 empleos directos, reconoce el gobierno del Edomex
Show mediático no beneficiará a Teotihuacán, alerta diputado
■ Se trata de un negocio en el que participan colaboradores de Peña Nieto, denuncia Octavio Martínez Vargas
■ Ningún desarrollo debe atentar contra el patrimonio del país, aclara
Ampliar la imagen Una turista observa, ayer, las luminarias instaladas en Teotihuacán Foto: Javier Salinas
Aun cuando se plantea como detonador del desarrollo económico de la zona, el gobierno del estado de México reconoce que el proyecto Resplandor teotihuacano sólo generará 250 empleos directos para los habitantes, cuando la población de Teotihuacán es de 208 mil personas, y que únicamente se entregarán 50 créditos para microempresas de 100 mil pesos cada uno.
En el documento donde se detallan los alcances del corredor turístico, entregado a la Comisión de Cultura de la Cámara de Diputados por el titular de la Secretaría de Turismo estatal, Alfredo del Mazo Maza, se asegura que sólo un tercio de la población económicamente activa cuenta con empleo, aunque de ese porcentaje la mitad se dedica al comercio y los servicios, y casi 60 por ciento gana menos de dos salarios mínimos.
Empresa contratada sin licitación
El proyecto no tendrá un impacto de beneficio directo a la comunidad, sino que se trata de un negocio en el que están involucrados colaboradores del gobernador Enrique Peña Nieto, denunció el presidente de la Comisión de Turismo, Octavio Martínez Vargas.
“La administración de Peña Nieto debe aclarar quiénes son los dueños de la empresa Mario Alberto Gómez y Compañía, que realizó las obras de perforación en la zona arqueológica de Teotihuacán, y a la que, sin licitación de por medio, se le adjudicó el contrato”, afirmó.
El legislador perredista sostuvo que se tiene información en el sentido de que “familias cercanas” al gobernador serán las beneficiadas económicamente con el proyecto, específicamente con la plusvalía de la compra de terrenos ejidales baratos y su reventa con valor comercial.
El proyecto desarrollado en conjunto por la Secretaría de Turismo federal –como aseguran los documentos–, por conducto del Fondo Nacional para el Turismo (Fonatur), y la secretaría a cargo de Del Mazo Maza, pretende incrementar a 3 millones el número de visitantes, y que la ocupación hotelera suba 60 por ciento, para lo cual se construirán nuevos espacios de hospedaje, preferentemente de lujo, que se ofrecería principalmente a extranjeros.
Castigo a responsables
Según la información entregada a la Comisión de Cultura, actualmente sólo 18 por ciento de los visitantes a Teotihuacán son extranjeros y se pretende que con el proyecto multimedia el porcentaje suba a 25.
Según el balance del gobierno de Peña Nieto, no hay articulación entre los atractivos y actividades en la zona; los servicios turísticos son “de baja calidad”, los precios de los servicios son altos por falta de oferta y hay un “limitado aprovechamiento del patrimonio turístico”.
Así, las prioridades del proyecto, que tendría como principal atractivo el espectáculo de luz y sonido, son “posicionar el corredor de Teotihuacán como el destino turístico-cultural más importante del país”.
Al respecto, Martínez Vargas aseguró que los legisladores no se oponen a desarrollos de carácter turístico, en este caso en Teotihuacán, sino demandan que se aclare el objetivo comercial e impedir que se continúe el daño al patrimonio que ocasionó la instalación de cientos de lámparas en la piedra original. “Ningún desarrollo debe atentar contra el patrimonio del país”, aseguró.
La principal demanda de los legisladores, dijo, sigue siendo que Peña explique por qué autorizó que se hicieran miles de perforaciones en la zona arqueológica, así como “una investigación a fondo y que se castigue penalmente a los responsables, pues atentar contra el patrimonio es delito federal”.