■ Deshizo cuerpos de 300 en sosa cáustica
Presenta la PGR a El Pozolero
■ Trabajaba para el cártel de los Arellano
La Procuraduría General de la República (PGR) presentó ayer ante los medios de comunicación a Santiago Meza López, El Pozolero o El Chago, quien estaba al servicio de capos de la droga del cártel de los hermanos Arellano Félix y tenía presuntamente la función de desintegrar en sosa cáustica a sus víctimas, principalmente en Tijuana, Baja California.
Durante un encuentro con los representantes de los medios de información en las instalaciones de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO), el vocero de esa dependencia, Ricardo Nájera, dio lectura a un comunicado, en el cual explicó la forma de operar de ese hombre, detenido el pasado jueves en la carretera Ensenada-Tijuana, quien se encuentra fuertemente custodiado por personal del Ejército y la Policía Federal Preventiva.
De acuerdo con el funcionario, a El Pozolero se le atribuyen al menos 300 desapariciones. Además, era uno de los 20 delincuentes más buscados por la FBI.
“Santiago Meza López manifestó ser El Pozolero (término con el que se le conoce en el crimen organizado a la persona que desaparece los cuerpos de los que han sido ejecutados), que su forma de operación era meter los cadáveres que le entregaba Teodoro García Simental, El Teo, en un recipiente con agua y sosa cáustica por 24 horas o hasta su completa desintegración, y que por dicha actividad le pagaban 600 dólares a la semana”, apuntó el vocero de la PGR.
Según declaraciones de Meza López, los restos de los ejecutados eran depositados en una fosa clandestina, improvisada en un terreno ubicado en la colonia Colinas del Florido, en Tijuana, donde desde este fin de semana peritos de la PGR realizan la búsqueda de restos humanos.
En tanto, funcionarios de la SIEDO mostrarán en las próximas horas a El Pozolero cerca de 70 fotografías aportadas por familiares de personas que han desaparecido en el norte del país.