■ Se perforó más cuando se puso el pasamamos en la pirámide del Sol, según el titular del INAH

“No hay daños en Teotihuacán; el tema se politizó”, consideró Alfonso de Maria

■ Se cambiaron las obras sólo porque a ojos de la gente, que no es experta, había afectación en las estructuras, dijo

■ En 20 días concluirá la restauración de las piezas dañadas en La Venta, informó

Erika Duarte (Enviada)

Cuitzeo, Mich., 24 de enero. No hay ningún daño en Teotihuacán, y lo que se pudo haber afectado ya está siendo restaurado y regresado a su lugar, afirmó el director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Alfonso de Maria y Campos.

Señaló que se politizó el tema, porque hay un grupo importante que no quiere que haya luz y sonido en Teotihuacán.

Indicó que en el sitio donde se realizaron trabajos para instalar la base de las lámparas antes existían bases de concreto, que no penetraron en la obra original, sino en una coraza de protección; inclusive señaló que la pirámide ni siquiera era de piedra, sino de estuco, que ha sufrido una serie de procesos en diferentes épocas.

De Maria apuntó que fueron mayores las perforaciones para colocar el pasamanos en la pirámide del Sol.

El director del INAH detalló que para la colocación del pasamanos metálico, que llega hasta lo alto de la pirámide del Sol, se hicieron perforaciones más profundas que las recientes, sin que en ese entonces hubiera quejas.

En el caso de las obras para el espectáculo Resplandor teotihuacano se hicieron apegadas a las normas que determina el instituto, dijo. “Se politizó el tema, porque hay un grupo importante y respetable que piensa que no debe haber luz y sonido en Teotihuacán.”

De Maria y Campos explicó que ya se cambió el sistema de las obras, no porque se hubiera dañado el patrimonio, sino porque a los ojos de la gente, “que no es experta en la materia”, afectaba las estructuras.

Señaló que en el lugar de la base de las lámparas que se pretendían colocar antes había estructuras más grandes, inclusive unas cajas de concreto.

Abundó que las perforaciones hechas en días recientes fueron sobre una coraza de protección que se colocó en diferentes épocas, la primera en 1910.

De hecho, afirmó que originalmente la pirámide no era de piedra revestida pareja, sino una pirámide de estuco, rellena de piedra, barro y otros materiales más propensos a la humedad.

El responsable de resguardar el patrimonio histórico en el país también comentó que las diversas restauraciones que se han hecho a los inmuebles de Teotihuacán han sido más invasivos que los que se pretendían hacer para el espectáculo de luz y sonido. Sin embargo, dijo que han sido de acuerdo a las normas y posibilidades de cada época.

“Me preguntaría si todos los edificios coloniales que tienen luz, como la Catedral de Morelia, pueden o no tener una fijación. Pareciera que el patrimonio es intocable, sin embargo se puede tocar, si va acompañado de respeto y normas.”

–Al permitir una obra de este tipo, ¿el INAH previó las reacciones que generaría?

–Para eso están las autorizaciones que se dan, y tratamos de explicar que no se dañó nada y lo que pudo ser abierto se está regresando a su lugar de origen.

Asimismo señaló que la coordinación nacional de restauración supervisa que los materiales usados para la reconstrucción sean más suaves, a fin de que no haya discusión sobre si el lugar está o no en perfectas condiciones.

Caso La Venta

Por otro lado, el director del INAH adelantó que en 20 días concluirá la restauración en las piezas arqueológicas que fueron dañadas en parque de La Venta, en Tabasco, incluida la Cabeza Olmeca, la cual fue agredida con jugo de uva, sal y aceite durante un presunto ritual.

Se pronunció en favor de aplicar penas más severas para quienes dañen los monumentos históricos, e informó que el instituto que encabeza ya trabaja con la Cámara de Diputados para la reubicación de las referidas piezas en un lugar cerrado y bajo resguardo en Tabasco.

Afirmó que lo que más las daña son la lluvia ácida y las inundaciones que se han presentado en la ciudad de Villahermosa, especialmente en el parque donde se ubican los vestigios, por ser un lugar bajo y cerca de la ribera del río Grijalva, que incluso ha tenido que ser protegido con costales de arena.

El funcionario agregó que ya existen proyectos para la construcción de un museo en la ciudad tabasqueña donde pueden preservarse de manera más adecuada los legados de la cultura olmeca.