■ Felipe Calderón se compromete a llevar la solicitud a Pemex
Demanda Ulises Ruiz edificar en Oaxaca la nueva refinería
■ Para decidir, se tomará en cuenta la razón de justicia social, señala
Juchitán de Zaragoza, Oax., 22 de enero. El presidente Felipe Calderón se comprometió a llevar, “con mucho gusto”, la petición del gobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz, para que la nueva refinería de Petróleos Mexicanos (Pemex) se construya en la ciudad de Salina Cruz, siguiendo una razón de justicia social, y prometió que tomará en cuenta este criterio, además de los técnicos y económicos para determinar la sede.
Por el momento no se ha descartado Oaxaca ni otros lugares para la ubicación de las nuevas instalaciones petroleras, respondió Calderón, y dejó abierta la pugna que mantienen estados como Guanajuato, Michoacán, Tabasco y Oaxaca por albergar la refinería.
El jefe del Ejecutivo federal fue recibido por una banda musical y cientos de pobladores, e inauguró en este municipio la Central de Energía Eólica Parques Ecológicos de México, propiedad de Lorenzo Zambrano y de la empresa española Iberdrola.
Al darle la bienvenida, Ulises Ruiz no escatimó elogios para el panista, a quien agradeció que, “sin distinción partidaria, como lo hacen los gobernantes de estatura, usted está cumpliendo al reconocer con hechos que esta región, además de su enorme potencial, tiene tanto derecho como el resto de la República al mejoramiento de sus pueblos”.
El gobernador aseguró que, sin populismo y sin proselitismo político, el Ejecutivo federal sienta las bases para que el sur y el sureste contribuyan al desarrollo nacional, “transitando hacia su propio crecimiento”.
También hizo un reconocimiento a Calderón porque “con prontitud, pero sobre todo con firmeza, integralidad, visión democrática y sensibilidad social”, ha propuesto una política de Estado que garantiza la viabilidad del proyecto de nación y coloca a México a la vanguardia internacional para superar estas circunstancias.
“No lo distraigo enumerando todas las ventajas de nuestra ubicación geográfica”, explicó Ruiz, y abogó en favor de la edificación de la refinería en Salina Cruz, ya que, sostuvo, cuenta con las mejores condiciones técnicas y económicas que no se logran en otras regiones del país.
Así dio paso a su petición: “Hacemos votos para que los criterios técnicos y económicos de ese importante proyecto para la nación sean justipreciados con ese elemento olvidado: la justicia social para quienes han contribuido a la grandeza de México.”
Después de agradecer la presencia de mujeres istmeñas y el traje huave que obsequiaron a su esposa, Margarita Zavala, Calderón lamentó que el Congreso de la Unión no haya alcanzado el consenso para que la reforma energética permitiera la inversión privada en la construcción de refinerías.
Ante varios legisladores, entre ellos el senador priísta Francisco Labastida y el diputado panista David Maldonado, calificó la posición del Congreso de “respetable”, pero señaló que si hubiese aprobado su propuesta de permitir la inversión externa en refinerías, su respuesta a los oaxaqueños habría sido otra: “De una vez me arranco con el proyecto de Salina Cruz”.
Pero aclaró: “Como no se aprobó esa parte de lo que propuse, Pemex se va a tener que ir una por una”, en referencia a las refinerías.
Calderón dio instrucciones a Pemex para que analice “a conciencia” la viabilidad y rentabilidad de las sedes, así como el impacto social que puede generar en determinada región la construcción de la refinería.
Insistió en las ventajas de la participación privada en el sector energético, al señalar que el gobierno, en vez de haber invertido 20 millones de pesos en cada uno de los molinos de generación de energía eólica inaugurados ayer, los gastó en beneficio de los oaxaqueños.