Balance de la Jornada
■ Siguen los experimentos en la selección
Ampliar la imagen Héctor Mancilla y Antonio Naelson anotaron ayer en el estadio Nemesio Diez Foto: Ap
El seleccionador Sven-Goran Eriksson no entendió la idea de convocar a los mejores jugadores de la liga mexicana rumbo al hexagonal de la Concacaf y sigue experimentando, como si el tiempo no apremiara. Inclusive, con la elegancia y el aplomo de los escandinavos adelantó que si México pierde ante Estados Unidos no pasa nada, pues finalmente la idea es clasificar a Sudáfrica sin importar en qué posición.
Para Eriksson no hay historia, trayectorias ni jerarquías y sigue poniendo la playera del Tri al alcance de jugadores como Néstor Calderón, Marco Fabián o Diego Martínez. El llamado del siempre aguerrido Leandro Augusto, a pesar de que con Pumas se le vio fuera de ritmo, y los chispazos de Lucas Ayala en el Interliga fueron motivo suficiente para que jueguen el amistoso del día 28 frente a Suecia.
El embrollo está en que en el partido eliminatorio contra Estados Unidos no contará con europeos importantes, como Andrés Guardado, quien se lesionó y estará al menos un mes fuera, mientras el zaguero del Barcelona, Rafael Márquez, genera dudas por sus constantes lesiones. Otras bajas seguras son Jonny Magallón y Héctor Moreno. Ello sin contar a los suspendidos Gerardo Torrado, Carlos Vela y Fernando Arce.
El vecino del norte cumple casi 15 días de concentración y trabajo con el técnico Bob Bradley, por lo que espera mostrar buen entendimiento en la cancha. A ello sumará el lugar de su fortaleza y máximos triunfos, el estadio Columbus Crew, donde se mantiene invicto en seis partidos eliminatorios rumbo a mundiales con dos aliados infaltables: el frío y el público. Para colmo, el ex seleccionado Alexis Lalas tomó el papel de agitador con declaraciones de “odio” hacia el representativo tricolor.
Todo indica que el Clausura 2009 será el de redención tras el gris Apertura 2008, escaso en goles y rebosante de insípidos empates. Apenas en la fecha uno hubo feria de goles (33) y algunos partidos tuvieron alta dosis de emotividad, sobre todo el Chivas-Cruz Azul, así como las goleadas del Monterrey y Pachuca. Hasta los árbitros se pusieron a tono y hubo pocas fallas que lamentar.
Apenas rodó el balón y el tema del descenso se puso color rojo carmesí. Los Indios de Ciudad Juárez treparon varios peldaños con una victoria que se convirtió en oro puro al combinarse con las derrotas de Tigres, Necaxa y Puebla. Su víctima directa, los Tecos de la UAG, se destacan porque mueren por mano propia ante los numerosos errores de El Patrón Juan Carlos Leaño.
La mexicanización cantada en Cruz Azul resultó una falacia con la anunciada llegada del atacante paraguayo Roberto Ovelar. Desde hace varios torneos la directiva cementera ha pregonado su intención de prescindir paulatinamente de los foráneos; sin embargo en cada oportunidad ha tenido la justificación precisa para importar futbolistas.
Otros que acabaron comiéndose sus palabras fueron los directivos de Chivas. El vicepresidente Néstor de la Torre dijo que el veterano Jared Borgetti no cumplía con el perfil del jugador rojiblanco, por ello quedaba descartado y preferían voltear hacia su cantera. Horas después se anunció con bombo y platillo el fichaje del romperredes sinaloense.
El máximo jalón de orejas lo recibió Ramón Díaz; el Pelado palpó en carne propia el desamor de su afición: nadie lo quiere porque simplemente no ha desquitado su altísimo sueldo. Reaccionó desdeñoso ante un aficionado en el aeropuerto, pero días después debió disculparse (y desechar todos los pretextos por su inesperada eliminación en el Interliga). Ayer Cabañas simplemente fue su salvador.