■ Proliferación de giros negros, desabasto de agua e inseguridad, entre las deficiencias
La situación de Coyoacán no mejora, queja de los vecinos de la demarcación
■ El caso que más comentarios levanta: la remodelación de los jardines Centenario e Hidalgo
De las principales problemáticas que enfrenta poco o nada se ha resuelto. El reclamo de habitantes de la delegación Coyoacán en esta administración, como en anteriores, sigue siendo el mismo. Inseguridad y desabasto de agua potable en las colonias populares, así como una batalla infructuosa en contra de la proliferación de giros negros, se mantienen como una constante en los dos años de la gestión del jefe delegacional, Heberto Castillo, en quien se depositó la confianza para limpiar la mala imagen que dejó su antecesor, Miguel Bortolini, sin resultados claros.
Para los residentes de colonias ubicadas en la zona de Los Pedregales, colindante con Ciudad Universitaria, la seguridad y el abasto de agua potable son añejas demandas que siguen sin atenderse de fondo por autoridad delegacional, lo que, inclusive, los llevó a protestar durante una gira de trabajo del jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard, en la demarcación, en diciembre pasado.
“Se había avanzado en la sustitución de la red de agua potable, pero el año pasado se interrumpieron los trabajos, de tal manera que es cotidiana la escasez de agua”, expresó Marco Fuentes, del comité vecinal de Santa Úrsula, quien señaló que tampoco ha habido resultados en materia de seguridad, porque no existe un proyecto integral para combatir la delincuencia. Incluso, se sabe que el número de unidades para realizar trabajos de vigilancia se ha reducido considerablemente.
A ello se suma la proliferación de giros mercantiles sin el uso de suelo adecuado, como cantinas o bares, que operan al amparo de algunos servidores públicos de la demarcación. “Un día clausuran y al otro ya están amparados”, aseguró la agrupación de comerciantes establecidos del Centro Histórico, que recientemente denunció actos de corrupción en la demarcación.
Francisco Álvarez, uno de sus representantes, atribuyó esta situación a la “falta de carácter” del jefe delegacional, Heberto Castillo, para imponerse a sus subalternos. “Cada quien dispone y jala a su conveniencia”, agregó, al señalar que el cambio constante de responsables en áreas estratégicas, como la de Jurídico y Gobierno, también ha repercutido.
Ésta es una queja recurrente entre los colonos, incluso entre aquellos que ven en el perredista mayor acercamiento con la comunidad que sus antecesores. Antonio Purón, de la Asociación de Vecinos de Villa Coyoacán, consideró que ha existido mejor diálogo, pero “éste no necesariamente ha llevado a buen término las iniciativas que se proponen, ya sea por compromisos con el gobierno central o con grupos del PRD, e incluso porque no se ha rodeado de gente cercana a él”.
El caso más emblemático y que ha generado mayor ruido entre la población es el proyecto de remodelar los jardines Hidalgo y Centenario y la promesa de “limpiar” de comerciantes ambulantes la zona, que a nueve meses de haber comenzado las obras mantienen dividida a la comunidad y sin concluirse.