■ El director Ignacio Santos buscaba ser relecto, pero un comité rechazó su nominación
Detectan múltiples irregularidades en el Hospital Infantil de México
■ Infecciones intranosocomiales, indisciplina, amenazas y malversación, entre las anomalías
La semana próxima concluirá la gestión de José Ignacio Santos Preciado como director del Hospital Infantil de México Federico Gómez, cargo que ocupó cinco años y para el cual podría haberse relecto, de no ser por las diversas irregularidades y deficiencias que existen en la institución, las cuales fueron detectadas por el comité de científicos que llevó a cabo la primera parte de la consulta para renovar la directiva.
Aunque Santos Preciado presentó su solicitud para participar en la contienda, el grupo de cinco notables –todos miembros de la junta de gobierno del nosocomio– que realizó la auscultación entre la comunidad del Infantil de México y las entrevistas a los seis aspirantes inscritos decidió rechazar su postulación y excluirlo de la terna que se presentará al resto de los integrantes del órgano de gobierno este jueves, en la reunión en que se designará al nuevo director.
Esta situación, inusitada en la historia de los procesos de elección de directivos de hospitales e institutos nacionales de salud, se originó por denuncias y quejas que médicos e inclusive uno de los aspirantes presentaron al comité encabezado por el ex secretario de Salud Jesús Kumate Rodríguez. Aseguraron y presentaron pruebas de que durante la gestión de Santos Preciado aumentó el número de infecciones intrahospitalarias, las cuales se ubicaron por arriba de 11 por ciento, aunque el director lo atribuía a que había un mejor registro de esos problemas. Hasta 2003, el reporte de infecciones nosocomiales era de cinco a seis por ciento.
Además señalaron cuestiones de indisciplina en diferentes áreas del sanatorio, entre ellas que algunos trabajadores no portaban uniformes y realizaban sus actividades con ropa de mezclilla. Además, que introducían alimentos a lugares donde está prohibido. Sobre todo, destacaron la ausencia de planes efectivos para mejorar la calidad de los servicios que presta el hospital.
Todavía más grave fue que algunos trabajadores que inicialmente le expresaron su apoyo para que fuera relecto terminaron aceptando que acudieron ante el comité de científicos presionados y bajo la amenaza de que podrían perder el empleo.
Durante la auscultación también se informó al comité que, durante su gestión, Santos Preciado tuvo seis administradores, de los cuales dos fueron inhabilitados por la Secretaría de la Función Pública.
Entre otras irregularidades administrativas está una observación, resultado de la auditoría 07-1.0.0., en la cual se detectó un presunto daño patrimonial al hospital por 600 mil pesos en el pago de la nómina. En 2006 y el pimer semestre de 2007 cuatro empleados recibieron “sobresueldos” que no fueron registrados en la documentación del nosocomio, pero que sí fueron incluidos en el dispositivo magnético que se entregaba al banco para que efectuara los pagos.
Luego de escuchar a los trabajadores y a uno de los candidatos, el comité, en el que además de Kumate participaron los doctores Eduardo Nasrallah Rada, Guillermo Robles Díaz, Guillermo Ruiz Palacios y Roberto Ahued Ahued, decidió que la terna quedara integrada por los médicos José Alberto García Aranda, Alejandro Serrano Sierra y Guadalupe del Socorro Moguel Parra. Los dos primeros salieron del hospital a la llegada de Santos Preciado, en 2004.
Trabajadores consultados señalaron que al Infantil de México le hace falta un director con liderazgo, que sea reconocido por su trayectoria clínica y académica, y sobre todo, resaltaron, “que realmente le interese la salud de los niños, principalmente de los más pobres, pues son quienes vienen”.