■ Puede producir infecciones y daños irreversibles al oído, asegura
Advierte el IMSS sobre daños por usar audífonos mientras se hace ejercicio
Entrenar o correr escuchando música con audífonos puede generar infecciones y daños irreversibles en los oídos, advirtió el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
La coordinadora del área de Audiología y Otoneurología del Hospital General Regional Carlos MacGregor Sánchez Navarro, Alma Pesquera Romero, explicó que esta situación afecta principalmente a personas de entre 15 y 25 años de edad, quienes utilizan reproductores portátiles con sonido en una frecuencia de 80 a 120 decibeles.
Señaló que 4 de cada 10 jóvenes que acuden a consulta en el Instituto por problemas auditivos, acompañan el ejercicio con auriculares, ya sea en un centro deportivo, parque, bosque o en el gimnasio. En los pasados 10 años, subrayó, la atención para este sector de la población se incrementó en 20 por ciento.
El alto nivel de sonido emanado por estos equipos pone en riesgo a los deportistas de padecer trastornos en el oído que pueden llegar a la hipoacusia (sordera).
De acuerdo con cifras del Seguro Social, en nuestro país 27 por ciento de la población sufre algún deterioro en los oídos, transitorio o permanente, porcentaje que podría triplicarse en los próximos años.
En cuanto al riesgo por la proliferación de bacterias u hongos, Pesquera Romero mencionó que esto sucede por la humedad y sudor en el conducto auditivo externo, ocasionando infección aguda o crónica.
Al correr o hacer ejercicio elevamos el nivel de calor en todo el cuerpo y al usar los audífonos impedimos que haya ventilación en los oídos; es como si se usaran tapones. De esta manera los gérmenes se reproducen más rápido, se acelera la producción de cerumen (cerilla), y el riesgo de sufrir inflamaciones (otitis externa), especificó.
El sentido del oído es importante porque permite la comunicación pero es también uno de los más sensibles a ser dañados en la actualidad por los avances tecnológicos y el ruido cotidiano al que estamos expuestos.
En este contexto, la especialista indicó que dicho fenómeno social ha contribuido al adelanto de enfermedades auditivas, las cuales se manifestaban después de los 50 años de edad; pero hoy la juventud tiene problemas de sordera irreversible antes de los 20 años.
“Muchos adolescentes y jóvenes consideran que subutilizan su tiempo si no escuchan música cuando desarrollan actividad física, sin saber que afectan su salud. Hoy usan audífonos con el volumen muy alto, mañana estarán portando auriculares para la sordera”, refirió.
Lo recomendable es no utilizar estos aparatos, pero si se hace, es aconsejable usarlos con moderación, no más de 2 horas al día y con volumen por debajo de 50 decibeles –entre 20 y 30 es lo ideal–.