■ El CEN del gremio deberá convocar a congreso en 2009 para designar directiva
Otorgan toma de nota a la sección 59 del sindicato magisterial en Oaxaca
■ El líder Cuauhtémoc Sigüenza teme intervención del gobierno estatal en el primer cónclave
Oaxaca, Oax., 20 de diciembre. El Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje otorgó la toma de nota a la sección 59 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), integrada hace exactamente dos años por disidentes de la sección 22, la mayoritaria en la entidad, y así quedó debidamente avalada.
Érika Rapp Soto, presidenta de la Comisión Ejecutiva Seccional (CES), expuso que la certificación fue entregada por Jorge Hernández Castillo, del departamento jurídico del Comité Ejecutivo Nacional del SNTE, una vez recibida la notificación de la autoridad federal.
Explicó que el Comité Ejecutivo Nacional del SNTE deberá expedir la convocatoria en 2009 para la celebración del primer congreso ordinario de la sección 59 –integrada, según dicen, por unos 5 mil trabajadores– a fin de elegir a su nueva dirección seccional.
El congreso, sin embargo, se desarrollará “una vez dadas las condiciones” ante las diferencias y divergencias dentro del gremio, agregó.
Rapp Soto instó a la unidad y a la responsabilidad a los miembros de la CES para lograr el fortalecimiento de la sección 59 antes de su primer congreso.
Reprobó que algunos dirigentes se hayan desnudado parcialmente fuera de la catedral para demandar al Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO) el pago de salario de unos 400 profesores “externos” y cese a la represión administrativa.
“Esos actos denigran a la sección 59 y a los maestros que debemos ser ejemplo”, remarcó.
También demandó al gobierno estatal un “trato igual” como el otorgado a la sección 22 al estar la gremial legalizada. “Queremos un trato institucional, no de sumisión, no de compromisos, no de alianzas”, asentó.
Érika Rapp Soto expresó que no buscará ser designada secretaria general ni aceptará algún otro cargo más en el primer congreso.
Cuauhtémoc Sigüenza Orozco, secretario general de la sección 59 y quien encabeza a la disidencia en la misma, advirtió que el primer congreso puede ser manipulado por el gobierno estatal para nombrar a un secretario general afín a sus intereses.
“Humberto Alcalá Betanzos, Joaquín Echeverría Lara y Miguel Silva Selvas, quienes están vinculados al régimen, seguramente pretenderán ocupar la secretaría general”, advirtió.