■ Las autoridades reiteran que la afectación es mínima
Recorrido por las pirámides corrobora daños: expertos
■ El gobierno del Edomex confirma su apertura el 29 de enero
Las pirámides del Sol y la Luna ,en Teotihuacán, los monumentos arqueológicos más visitados de México, son alterados en su “imagen” y “arquitectura” debido al montaje de alrededor de 6 mil 730 luminarias para las próximas visitas nocturnas denominadas Esplendor teotihuacano.
Así lo corroboraron investigadores y docentes de tres sindicatos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) tras realizar este miércoles un recorrido de dos horas por el sitio prehispánico con Laura Pescador, titular de la Coordinación Nacional de Arqueología, y con los principales integrantes del Consejo de Arqueología, como Joaquín García Bárcena.
Tras la visita a Teotihuacán, Yolanda Cano, secretaria general del sindicato DII-IA2 de arquitectos del INAH, explicó que con este recorrido se corroboró la afectación que reciben las pirámides debido a las múltiples perforaciones que se ejecutan para colocar 3 mil 365 luminarias en cada una de las estructuras teotihuacanas.
“No se llegó a ningún acuerdo. Las autoridades nos convocaron a una reunión técnica el próximo viernes, pero dejaron entrever que esperáramos hacia el final del proyecto para ver los resultados.”
La sindicalista del INAH dijo que Laura Pescador admitió ciertas violaciones a los monumentos que no estuvieron previstas en el proyecto recientemente aprobado de luz y sonido, pero no planteó ninguna solución. “Si subes a las pirámides los daños son visibles, pese a que lo quieren ocultar con materiales que simulan el empedrado prehispánico.”
A manera de ejemplo, Cano explicó que los artefactos colocados en fibra de vidrio alteran la imagen tanto de la zona arqueológica como de las pirámides.
En síntesis, reveló la dirigente de los arquitectos del INAH, se solicitó la presencia de Alfonso de Maria y Campos, director general del instituto, así como la presentación del proyecto multimedia avalado recientemente, y que además se manifieste “que los pobladores del lugar están conformes con esta alteración”.
Otra de las peticiones vertidas por los investigadores es que se contemple la evaluación de un grupo interdisciplinario en la conformación de un proyecto de tal envergadura.
“Esto no sólo incumbe a la arqueología, sino a la arquitectura, urbanismo, antropología social y restauración, entre otras disciplinas.
“Además –prosiguió– pedimos que sean retiradas las cajas que cubren las luminarias y sea detallado el proyecto original en aspectos referentes a la colocación de la pantalla, el guión y la grada –que supuestamente será movible–, entre otros elementos.”
Se espera que el espectáculo nocturno empiece el 29 de enero, impulsado por los gobiernos federal y estatal, vía las secretarías de Turismo respectivas, además cuenta con la participación de corporativos privados dedicados a la creación de proyectos multimedia.
A lo largo de dos años, el proyecto cambió infinidad de detalles, hasta que fue avalado por el Consejo de Arqueología y la Coordinación Nacional de Arqueología del INAH.
Entre algunos de los cambios realizados tras la propuesta original destaca el del nombre Teotihuacan, centro del universo, ahora Esplendor teotihuacano, además del rechazo a los carritos que recorrerían la Calzada de los Muertos o la adaptación del museo de sitio como si fuera un gran palco.
En torno a este proyecto, también se planean circuitos turísticos en el estado de México; además del Expreso teotihuacano, ferrocarril que transportaría a la gente muy cerca de la zona arqueológica.