■ El retiro de acciones y bonos de deuda, en un lapso de dos meses: BBVA Bancomer
Inversionistas externos sacaron del país $22 mil 190 millones
■ El monto, adicional a los 18 mil 277 millones que utilizó el Banco de México de las reservas
■ Salida “normal” de capitales, aducen directivos al presentar el reporte Situación México
Ampliar la imagen Jorge Sicilia, economista en jefe para México y Norteamérica de BBVA, acompañado de Adolfo Albo, economista en jefe para México, en la conferencia de prensa Foto: Carlos Ramos Mamahua
En un par de meses, pero de manera más intensa en octubre, inversionistas extranjeros sacaron de México recursos por 22 mil 190 millones de dólares que tenían depositados en acciones en la Bolsa Mexicana de Valores o en bonos de deuda del gobierno federal, reveló este miércoles BBVA Bancomer, el principal grupo financiero del país. Estos recursos son adicionales a los 18 mil 277 millones de dólares que el Banco de México utilizó en octubre y noviembre de la reserva internacional de divisas para tratar de contener la devaluación del peso que, con todo, alcanza ya 26 por ciento.
Sólo en octubre, los inversionistas extranjeros con recursos en acciones que cotizan en la Bolsa Mexicana de Valores sacaron del país recursos por 11 mil millones de dólares, mientras que desde mediados de agosto y hasta finales de octubre sacaron 11 mil 190 millones de dólares de inversiones en bonos de la deuda interna del gobierno federal, reportó Jorge Sicilia, economista en jefe para Norteamérica del consorcio financiero español BBVA, controlador de BBVA Bancomer.
“Las salidas que estimamos están medidas en términos de acciones en posesión de extranjeros”, añadió Sicilia. “Creemos que las salidas en octubre fueron de 11 mil millones de dólares”, expuso durante la presentación del reporte Situación México, elaborado por el grupo financiero.
Respecto de los bonos de la deuda interna del gobierno federal, la información es exacta, dijo: desde mediados de agosto han salido unos 11 mil 190 millones de dólares. Una parte de esa cantidad, añadió, refleja el ajuste del tipo de cambio del peso frente al dólar ocurrido a partir de la primera semana de octubre (cuando la moneda mexicana se devaluó 25 por ciento), pero si ajustamos la cifra creemos que han salido unos siete mil 500 millones de dólares”, dijo.
Las salidas de capitales extranjeros de la bolsa y de inversiones en bonos de deuda del gobierno “se están produciendo” menos que en América Latina y que en otras naciones emergentes “pero están saliendo y es normal en este tipo de movimientos financieros que esto ocurra”.
Para efectos comparativos, la salida de capitales de la bolsa y del mercado de bonos mexicanos ocurrida entre mediados de agosto y finales de octubre, de 22 mil 190 millones de dólares, es equivalente a 44 por ciento de los 50 mil millones de dólares en que se calcula el quebranto causado por el gestor de fondos Bernard Madoff, considerado hasta ahora como el mayor caso de estafa individual. También es equivalente a 65 por ciento de los 34 mil millones de dólares que las tres fabricantes de automóviles de Estados Unidos solicitaron al Congreso estadunidense para salvar de la bancarrota a una industria que contribuye con 5 por ciento del producto interno bruto de la mayor economía del planeta.
La salida de recursos documentada este miércoles por BBVA Bancomer no es el único costo en términos de divisas para el país del colapso financiero que se agudizó a partir del 15 de septiembre pasado cuando el gobierno estadunidense se hizo a un lado y dejó caer en la bancarrota al banco de inversión Lehmann Brothers.
Aunque no forma parte de la información revelada ayer por la institución financiera, datos del Banco de México indican que desde octubre y hasta el 11 de diciembre han sido utilizados 18 mil 277 millones de dólares de la reserva internacional de divisas para ser subastados entre los bancos que operan en México, una medida que buscó contener la depreciación del peso, que en la primera semana de octubre llevó a una devaluación de 25 por ciento después de poco más de dos años en que sólo ocurrieron movimientos marginales en el tipo de cambio del peso frente al dólar.
“Los extranjeros están saliendo tanto del mercado accionario como del mercado de bonos y en este contexto yo diría que hay algo positivo: se está demostrando aquí que los mercados son lo suficientemente líquidos como para que si alguien quiera salirse lo haga sin mayor problema. Digo que esto es positivo porque permitirá que cuando las condiciones mejoren mundialmente, los mercados donde más rápidamente van a regresar es a aquellos que mostraron madurez”.
A partir de los datos sobre los movimientos de capitales, el especialista de BBVA consideró que es difícil, en el corto plazo, pensar en un regreso del tipo del cambio del peso a niveles próximos a como estaba antes de octubre. “Esos niveles debemos olvidarlos, porque los flujos están siendo negativos, porque los precios de las materias primas no se están apreciando y eso afecta, en el caso de México, en el precio del petróleo”.
La salida de capitales, dijo, es un proceso “normal” en las circunstancias que se han dado en los mercados internacionales, y eso ha pasado en México, en otros países de América Latina y en otros mercados emergentes.
“Si la pregunta es si puede continuar, la respuesta es que sí puede continuar. La pregunta es cuándo va a empezar a haber los precios adecuados para que vuelva a ser atractivo (traer recursos). En el corto plazo me resulta difícil ver un retorno a niveles que permitan la entrada de capitales otra vez”, explicó.