■ Azota de igual forma a los países desarrollados que a economías emergentes, afirma
La crisis financiera se está convirtiendo en una verdadera depresión, alerta FMI
Francfort, 10 de diciembre. El Fondo Monetario Internacional (FMI) revisará a la baja sus pronósticos para el crecimiento global cuando actualice sus proyecciones en enero, dijo el miércoles John Lipsky, subdirector gerente del organismo.
En una conferencia en Francfort, Lipsky expuso que la crisis financiera se estaba convirtiendo en una verdadera depresión, azotando de igual forma tanto a los países desarrollados como a las economías emergentes.
El FMI rebajó su pronóstico de crecimiento mundial a 2.2 por ciento desde el 3 por ciento previo. Lipsky explicó que el Fondo tendría que revisar a la baja las previsiones nuevamente el año próximo, pero agregó que las inminentes medidas de los gobiernos y de los bancos centrales para limitar el desplome podrían aliviar la caída.
“Estoy seguro de que vamos a revisar a la baja el pronóstico de crecimiento, pero también vamos a revisar al alza las expectativas de la respuesta política”, indicó.
Ante el avance de la crisis, los gobiernos del mundo han destinado miles de millones de dólares a paquetes de estímulo fiscal. Los bancos centrales desde Estados Unidos a Europa y de Nueva Zelanda a China han complementado las medidas, recortando las tasas de interés.
Lipsky manifestó que se esperan nuevos recortes de tasas, pero advirtió que algunos bancos centrales habían prácticamente perdido todo su poder de fuego.
“Algunos países, incluyendo algunos en Europa, probablemente tendrán mas espacio para flexibilizar más su política monetaria, pero otros, particularmente Estados Unidos y Japón, ya han reducido las tasas de interés a niveles muy bajos”, expresó.
“Los riesgos de una deflación están comenzando a convertirse en una preocupación en estos países y las brechas en la producción se han ampliado”, agregó.
Para empeorar las cosas, Lipsky dijo que los recortes de las tasas estaban teniendo un impacto limitado, tanto en los países desarrollados como en los emergentes, a medida que la crisis financiera continuaba haciendo estragos en el sistema bancario.
“La flexibilización monetaria probablemente sea menos efectiva en estimular la demanda, mientras las condiciones financieras son perjudiciales y la incertidumbre permanece alta”, afirmó.
Lipsky indicó que las economías emergentes están siendo sometidas a una creciente presión, a medida que los inversionistas retiran el dinero fuera de áreas percibidas como más riesgosas.
Las economías desarrolladas necesitan prepararse para una importante recesión, alertó. “Las recesiones en varias economías avanzadas podrían durar más tiempo que en situaciones anteriores, posiblemente justificando una mayor inversión pública en proyectos que típicamente tienen una duración más larga pero acarrean beneficios sustanciales a largo plazo”, afirmó.
En el lado positivo, dijo que aún había esperanzas de una recuperación el año próximo, pero que los reguladores tendrían que adoptar las opciones correctas. “Aún estamos esperanzados de que una estabilización de las condiciones financieras y un creciente respaldo de la política monetaria permitan una gradual recuperación que comenzaría hacia finales del próximo año”, declaró.